Matrimonio no planificado // Unplanned Marriage [COMPLETA]

Capítulo 28

—Cuídate entonces. —Prem asintió con la cabeza hacia Arthit.

—Sí, ustedes también. Nos vemos. —Él sonrió y comenzó a alejarse del lugar.

—¡Arthit! —Bright gritó por todo el lugar. Se dio la vuelta, preguntándose si había olvidado su billetera o algo así. —¡Será mejor que lo traigas la próxima vez!

Los ojos de Arthit brillaron antes de gritar. 

—¿Para qué? No lograrás robarlo, ¡ni siquiera lo intentes! —Se burló un poco de él, sabiendo que Prem estaba justo al lado de Bright y desapareció rápidamente.

****

—Estoy en casa. —Arthit saludó a la oscura habitacion. —Kongpop? —Preguntó en voz baja, preguntándose si había salido o simplemente se había quedado dormido. Entró en la cocina una vez que se quitó los zapatos y el abrigo, colocando la bolsa de comestibles, que había comprado en su camino de regreso, en la mesa.

¿Se escapó a algún lugar otra vez?

Pensó, explorando todo el lugar y buscando alguna pista o rastro que le diera algún indicio de a dónde había desaparecido su marido.

¿No estaba desesperado por verme hace un rato? Maldición. 

Arthit sacó su teléfono y buscó el número de Kong, marcándolo en un instante. Pasó, pero se desconectó después de cuatro pitidos. Eso sorprendió a Arthit y después de otro intento se desconectó de inmediato.

—¿Que demonios?

Arthit preguntó en voz alta, no agradándole para nada la situació.

¿Por qué se iría sin decirme nada? ¿Y a dónde iría tan repentinamente? ¿Trabajo? ¿Tienda de conveniencia?

Se preguntó, inventando varias razones para la desaparición de Kongpop.

Tal vez con su ex...?

Cruzó la mente de Arthit, haciéndole ver esta posibilidad como la más probable de inmediato. Mary llegó ayer y causó una escena una vez más, no le sorprendería que Jane supiera su dirección o el paradero de Kong.

Eso es bueno entonces, ¿verdad?

Sacudió la cabeza en un intento de deshacerse de todos los pensamientos extraños.

Debe haber apagado su teléfono después de que lo llamé para que no lo molestaran. Espero no haber arruinado su estado de ánimo... Estoy feliz por él, debo estarlo, ¿cierto?

Pero los sentimientos contundentes en su pecho decian lo contrario. Él fue el que le dijo a Kong que intentará comenzar de nuevo con su ex, así que, ¿por qué estaba triste?

Esperen, ¿no estoy pensando demasiado?

Arthit detuvo su imaginación salvaje por un momento.

Por supuesto que no.

Sacudió la cabeza, creyendole a su mentalidad generalmente racional y decidió irse a dormir con el estado de ánimo arruinado.

****

—P'Arthit, despierta por favor.

Kongpop sacudió su hombro, instándolo a despertar. Después de pasar casi toda la noche, enviando correos electrónicos, cartas de disculpas y explicaciones en lugar de sus padres, le dolía mucho la cabeza. Arthit lo llamó mientras hablaba con su padre y, por lo tanto, no pudo contestar.

Cómo Kongpop descubrió más tarde, la nota que había dejado para su esposo con la explicación de su inesperada desaparición se quedó sin leer bajo una bolsa de comestibles.

Su padre lo llamó justo después de la llamada que Kong tuvo con Arthit, y lo citó en un instante. Los rumores y los numerosos titulares sobre el matrimonio como una estafa ya no podían ignorarse. Kong no sabía nada de eso hasta el momento en que sus padres explicaron la situación y las consecuencias.

No estaba claro quién estaba detrás de todo el lío, pero podían hacer sus suposiciones. El tío y los primos de Kong fueron los primeros sospechosos, seguidos por otros miembros de la familia. Cualquiera que simplemente no pudiera aceptar el hecho de que el co-propietario legal de la compañía más grande de Tailandia era un completo extraño, y no ellos, estaba en la lista. Los meros rumores y la difusión de noticias inofensivas no causaron ningún daño hasta que la empresa comenzó a perder clientes debido a la disminución de la confianza.

Se convocó una conferencia de prensa inmediata y se programó para el día siguiente con el objetivo de aclarar cualquier malentendido y poner fin a esto.

—P', abre los ojos, no tenemos tiempo. —Kongpop estaba empezando a desesperarse ya que estaban a solo veinte minutos antes del comienzo oficial de la reunión de prensa.

—Kongpop, ¿por qué estás aquí? ¿Soy lo suficientemente bueno para ti ahora que tu ex te rechazó otra vez...? —Arthit murmuró todavía medio dormido y soñando.

—¡P'Arthit! No tengo idea de qué estás hablando, pero estamos en problemas. ¡Levántate, ahora! —Kongpop no sabía de dónde provenía todo ese comportamiento mandón, pero Arthit mencionó que Jane podría ser uno de los desencadenantes.

¿Suficientemente bueno? ¿Otra vez?

Se preguntó a qué se refería, tendría preguntarle más tarde.

—¿Q-qué? Kongpop, ¿qué está pasando? —Arthit abrió los ojos y se sentó derecho, su corazón latía rápido por un despertar repentino.

—Necesitas cambiarte, aquí. —Kong le tiró la ropa y desapareció. —Date prisa. —Añadió antes de cerrar la puerta del dormitorio.

Aunque Arthit no entendía nada, todavía tenía demasiado sueño para hacer preguntas y poner su actitud insegura. En apenas tres minutos, estaba siguiendo silenciosamente a Kongpop hasta su automóvil estacionado cerca.

—Te lo explicaré todo en el camino, pero déjame decirte esto ahora. —Kong se detuvo antes de abrir el vehículo. Arthit le dirigió una mirada inquisitiva.

—Eres mi esposo... —Kongpop lo miró directamente a los ojos. —...y te amo.

Una descarga eléctrica se disparó por todo el cuerpo de Arthit al escuchar esas palabras, haciéndolo despertar como siempre.

—No importa qué, tienes que recordarlo.