Capitulo 7.

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Apertura:

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Con las dudas en la mente

 completamente tranquila, 

eso creen los demás.


Actuaciones faciles de hacer

cuando solo estás rodeada

de ilusos e ingenuos.


Descubierta 

cuando te rodea una astuta serpiente.


Ella cree que la salvé

cuando en realidad,

nos salvé a ambas...


Cuando en verdad,

me traía con la culpa latente.

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Terminé de hablar con Pansy y me puse manos a la obra, de inmediato, sin esperar ni un solo minuto.

Fui en busca de Harry, necesitábamos gente para nuestra misión y él seria como anillo al dedo. Perfecto para lo que tenia en mente.

 Después de todo, no era tan difícil puesto que ya sabia que poción hacer, contaba con un plan magnifico y solo necesitaba unos pocos ingredientes, convencer a Harry, cosa fácil, y... bueno, lo ultimo si me costaría bastante.

Debería convencer a Snape. Si el susodicho aceptaba, todo saldría bien.

Nada se interpondría, esta vez íbamos a por Draco y no fallaríamos. 

Ademas teníamos la ayuda de la Slytherin, de Parkinson...


Mientras caminaba por la casa en busca de mi amigo, me paré a pensar en la extraña amistad que había llevado con Pansy en los últimos meses.

Ella incluso se había tragado su orgullo y disculpado por su actitud conmigo en Hogwarts, cosa que no esperaba en absoluto y que me había sorprendido muchísimo.

Podíamos hablar de varias cosas ya que ambas siempre andábamos atentas a todo, sus análisis y figuraciones eran algo muy interesante.

Tenia un humor muy perspicaz, algo que yo admiraba. Esa astucia para sacar comentarios ingeniosos en cualquier situación. 

En definitiva, me caía bastante bien, y aunque no lo pareciese, la apreciaba un poco. 

Incluso, llegando a atracción, pero solo era una tontería.

Probablemente se me pasara en unos meses, algo pasajero como con Ron.  Habíamos salido por un pequeño lapso, pero me sacaba de quicio, y ese aire despreocupado de él no ayudaba mucho. Así que mejor decidimos seguir siendo amigos como siempre.

Y con ella, bueno, no la conocía más que unos meses. No podía juzgarla del todo. 

Dejemoslo en que tenia sentimientos encontrados, ¿si?


Me quedé sumida entre los pensamientos danzantes  y descabellados, hasta que por fin encontré a Harry.

-Harry, Harry, necesito hablar contigo.- Le miré con seguridad, algo que le hizo extrañar. Pocas veces me mostraba dura con él, al menos en los ultimas semanas. 

De hecho, ya no hablábamos tanto, le había afectado lo de Luna...

-Claro, ¿Vamos al cuarto de Remus? Está vacío ya que salió con Tonks...

Sonreí y sin respuesta de mi parte nos dirigimos al lugar. ¿Qué pasaría por su cabeza? 


 -Es sobre los rescates. No podemos dejar a Draco y a Luna allá tirados, con Parkinson estábamos pensando en ir a por ellos. Necesitamos ayuda, necesitamos tu ayuda, Harry...Sé perfectamente que te sientes mal por no haberla salvado. Bueno, te damos otra oportunidad para hacerlo... ¿Aceptarás o dejarás que se vaya pudriendo de a poco?


Jugué con sus sentimientos y culpabilidad, lo admito. Pero, ¿De qué otra forma aceptaría sin rechistar? Era todo un terco y no andaba con ganas de discutir...

Él me miraba, nada más. No dijo nada, lo estaba analizando. 

Aceptaría de todos modos, tarde o temprano, así que no me preocupé de eso.

-Me avisas cuando estés claro, eso era todo.

Me fui sin nada mas, dejando a mis espaldas un Harry, muy confundido, solo.


En esos meses, se me había pegado la crueldad de los comentarios de Pansy, el sarcasmo y el deleite de algunas pequeñas maldades. Era divertido ver las reacciones de vez en cuando.

Un ejemplo de esto era como había planteado el tema a Harry. 

Vamos, ¡El pobre no sabia que decir! 

Parecía perdido... Que ternura, me hacia recordar a un niño pequeño horrorizado ante la idea de la muerte, y que por eso, acepta cualquier otra propuesta...

La astucia era un arma potente, y eso me estaba encantando... 




Única SalvaciónWo Geschichten leben. Entdecke jetzt