La puesta | | [Emiliaco]

Capítulo 23

—Sin duda fue una muy buena reconciliación —Sonrió el rizado mirando hacia el techo

—¿Reconciliación? —El castaño elevó una ceja mirando al rizado

—Si. Y estuvo muy buena —El rizado acarició la mejilla del castaño

—Tonto —Rio el castaño

—¿Entonces? —El rizado tenía una duda

—¿Entonces que? —Preguntó el castaño

—¿Que somos? —Respondió con otra pregunta el rizado

—No lo sé —Contestó el castaño mirando hacia el techo

—Acepta volver conmigo —El rizado junto sus manos e hizo un puchero

—¿Disculpa? —Giro su cabeza para ver al rizado

—¿Quieres volver a ser mi novio? —Preguntó con una sonrisa y agarro la mano del castaño

—Emi —El castaño pensó un poco la respuesta—. Claro que quiero ser tu novio de nuevo

—Te amo —El rizado se posó encima del castaño y lo beso

—Te amo mas —Dijo en medio del beso con una sonrisa

—Me debes una segunda ronda —Menciono el rizado después del beso

—¿Yo? ¿Pero por que? —Pregunto confundido

—La primera fue de reconciliación y la segunda va a ser para celebrar que volvimos a ser novios —Comentó el rizado

—Estas loco —Se rio el castaño ante tal comentario

—Amor, una segunda ronda ¿si? —El rizado puso ojitos de cachorrito

—Con una condición.

—¿Cuál? —Preguntó entusiasmado el rizado

—Solo si soy el activo esta vez —Respondió el castaño

—¡¿Que?! —El rizado abrió sus ojos

—Es broma —El castaño se empezó a reír por la cara que había puesto el rizado

—Igual no te dejaría ser el activo —El rizado también se empezó a reír

—¡Oye! ¿Pero por que no? —Le dio un leve golpe en su abdomen

—Mi amor eres pasivo por naturaleza —Contestó muy seguro el rizado

—Podemos probar puedo ser también activo. Te puedo demostrar que puedo ser también activo y no solo pasivo —El castaño estaba retando al rizado

—¿Enserio lo quieres intentar? —Preguntó dudoso el rizado

—Si. Podemos ser de esas parejas que son versátiles —Propuso el castaño emocionado

—¿Seguro? —Cuestionó el rizado dudoso

—Muy seguro —Asintió el castaño

—Ay no dime que es una broma —Al rizado no le parecía la idea de ser pasivo y que su novio fuera activo

—Emi no es una broma —El castaño puso su expresión seria

—Muy bien. Si quieres ser el activo estoy de acuerdo —El rizado aceptó la propuesta de su novio no tan convencido. En eso el castaño se empezó a reír

—No es cierto Emi —El castaño no podía dejar de reír

—Solo por eso me debes una segunda ronda —El rizado llevó su boca al cuello del castaño y le empezó a morder