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Recuerdo una noche nublada, tenebrosa, recuerdo ver un enorme ser huesudo, vestido de negro, era la muerte, esa noche, la última que vería yo, no recuerdo muy bien nada de lo que sucedió, pero, cuando me di cuenta caí, me convertí en un ángel caído.

Tenía una misión que no cumplí, se supone que tenía que proteger a un grupo de chicas, al parecer muy importantes para el cielo, cuando vi a muerte, le entregue algo, parecía un muñeco, aunque no se con certeza que era en realidad, luego, recuerdo correr, no sé porque, estaba asustada y nerviosa, hace unos días había enviado a todas esas chicas a un, monasterio, según para protegerlas, ese fue mi peor error, allí no estaban para nada seguras... cuando llegue a ese lugar, no había nada aparentemente malo, pero tenía una muy mala espina.

Me veo hablando con ellas, de temas vánales, pretendía mantenerlas entretenidas, hasta que una de ellas comenzó a hablar de experiencias que había tenido allí, y las demás le siguieron, el tema salió de la nada , hubo algo en las palabras de unas de ellas que me espanto, recuerdo lanzarme sobre esa chica y desabotonar su camisa, recuerdo haberme preocupado en sobre medida, en su pecho había un pequeño ser deforme, color gris y alrededor su piel estaba violeta, al parecer, en ese momento fue que logro verlo, al igual que todas, cuando vi ese pequeño ser sobre ella procedí a hacer lo mismo con los demás, ella era la peor, en las demás solo había un pequeño agüero, y a su alrededor un moretón, le pregunte a los dueños del lugar si lo veían, creo que para descartar alguna herida, solo a las chicas que no tenían ese ser, nada, no veían nada, automáticamente les ordene salir de allí.

La chica, que tenía ese demonio en ella, se quedó allí, estaba paralizada, le pedí al resto que siguieran sin mí, trate de llevarla conmigo, pero ella no se movía, y cuando la toque me queme, no entiendo muy bien la razón, ella al ver eso comenzó a llorar desesperadamente, trate de calmarla y pedirle que se levantará, hasta que visualice una sombra detrás de ella, la figura no tenía rostro, en su lugar había un profundo vacío, cuando lo mire el posó una de sus manos en el hombro derecho de la chica, la mano era huesuda, con unos dedos muy largos y al igual unas uñas muy largas, me oigo a mí misma preguntarle "¿Qué hiciste?" , ella negó una y otra vez, ante su evasión pregunte de nuevo con un tono más sombrío, "¿Qué hiciste?" , ella solo respondió "no lo sé" , luego de eso desapareció junto a esa figura, y no, no era la muerte, eso es lo único que con certeza puedo afirmar... luego solo me veo caminando fuera de ese lugar, con una cara tenebrosa, y una sonrisa... para nada adecuada con lo que había pasado.

Al reunirme con las otras cinco, todas estaban espantadas, tenían muchísimo miedo, y pienso que al verme ese temor que emanaban aumento, la única que parecía no estar así era Agnes, una chica de no más de 16 años, ella solo miraba el piso, no decía nada, ante eso me acerque a ella y levante su cabeza para que me viese, estaba llorando, la impresión de antes se había desvanecido , le sonreí y dije, "προστασία"*, poniendo un escudo sobre ella, trate de hacer lo mismo con el resto, pero huyeron de mí, fui tras ellas, pero por más que lo intentara no las alcanzaba, hasta que un par de chicos pasaron corriendo por allí, por alguna razón dejaron de correr y me quedaron mirando, de un momento a otro había un balón que iba en mi dirección, al tocarlo para apartarlo se convirtió en una enorme esfera negra de la que salieron un montón de espinas, todas muy grandes, la que cayó sobre Agnes, matándola en el acto, comencé a reír como loca, sin razón alguna, las demás estaban aterrorizadas, volví a tratar de acercarme a ellas pero cuando avance todo desapareció, no había nada, solo estaba yo y una enorme negrura... después de eso, no recuerdo nada.

Quince días después de eso, caí, me arrancaron las alas y me encerraron en una cabaña en medio de la nada, de la que no podía y ni aun puedo salir... desde esa noche han pasado casi treinta siglos y aun no entiendo que paso, no comprendo mucho, no recuerdo demasiado, cuando le digo eso a los otros ángeles que me vigilan, ninguno me cree, y no me parece nada raro, pues creer algo así de un caído que parece haber enloquecido después de estar tanto tiempo sola, allí sin poder salir... ahora, desearía saber que fue todo lo que me llevo a tener ese castigo, quiero saber quién eran esas chicas, pues no lo recuerdo o más bien, no quiero recordar.

"Protección" *

Recuerdos de un angel caidoWhere stories live. Discover now