Find You ; jjk

Capítulo | 25

«JungKook»

Las clases finalizaron y para mi suerte, no tenía práctica. Cada vez que ganábamos una carrera, el entrenador nos daba una semana sin entrenamiento, algunos no se conformaban con solo una semana, otros, practicaban sin importar qué.

Se podría decir que soy más bien lo segundo mencionado.

Como todos los días, me disponía a caminar hacia mi lugar de trabajo. Como siempre con mis auriculares puestos, con una canción aleatoria reproduciendo, en un intento de hacer más entretenido el transcurso.

I don't want a friend. I want my life in two.

No me encontraba tan lejos del lugar destinado. Aquél lugar el cuál me he dedicado a laborar estos largos cinco meses. Me ha llevado un gran esfuerzo poder explicarle e implorarle a Suni a que no le dijera nada a mis padres. En un principio me advirtió que si ganaba dinero no lo malgastara y claro que no he hecho eso, al contrario, he ahorrado, ni siquiera sabía con qué finalidad lo hacía. No tenía en mente en que gastar el dinero, sin embargo, algún día será de mucha utilidad, nunca se sabe. Además, habían días que no tenía nada que hacer y quería ganar dinero con mis propios méritos y que mis padres casi nunca se encontraban en casa, que mejor de no dejar pasar la oportunidad.

Al entrar a mi lugar de trabajo, a diferencia de mi escuela, saludé a algunas personas que hallaba mientras caminaba por los pasillos, solo por educación. Estando aquí me dí cuenta, que entre un ambiente laboral y otro escolar hay una gran diferencia, aquí había gente bastante amigable y madura con la que se podía intercambiar palabras.

El vestuario de varones estaba vacío, saqué mi uniforme y guardé mis pertenencias. No me gustaba ocupar el uniforme, pero no tenía de otra.

Ya estando listo, me dirijo al salón, encontrándome con algunos clientes disfrutando de la comida. Al menos no habían muchas personas, como los días viernes, es un total caos y es donde más entreno mi paciencia.

Al terminar de atender a una pareja, camine hasta una esquina del lugar para abrocharme las agujetas. En ello veo a alguien que logré reconocer de inmediato, que en un mal cálculo se le caen algunas servilletas que traía consigo. Abrocho mis agujetas y voy a ayudar.

La persona frente a mi levanta la vista y puedo ver un pequeño rubor en sus mejillas, no suele ser tan expresiva, en un principio me pareció ser una chica bastante seria e incluso antipática, tanto así que era intimidante observarla. Me equivoqué en pensar que así era, cuando en realidad era todo lo contrario.

Ella sonrie. Su flequillo está más corto, antes casi le cubría los ojos.

—Hola Airi —la saludo en un susurro antes de que emitiera palabra alguna.

—Hola JungKook —saluda de igual manera.

Al pasarle las servilletas que logré recoger, un recuerdo nace en mi cabeza, de la vez que vi a Kim por primera vez aquí, ayudando de igual manera a mi compañera de trabajo.

Vuelvo a mi postura anterior, Airi hace lo mismo.

—Gracias —susurra y pasa por mi lado sonriendo, le correspondo de manera leve.

Veo como algunos de mis compañeros se le quedan viendo. No me sorprende, siempre supe que Airi llamaba la atención de ellos y de algún otro chico fuera del trabajo, pues si, es una chica bastante atractiva. Sus ojos color avellana cautivan a cualquiera, es simpática aunque luzca lo contrario en la primera impresión.