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- mi casa es tu casa Sab, siéntete cómoda. - volteó a verme para luego caminar hacia la extravagante cocina - quieres algo de beber?.

Negué con mi cabeza concentrada en cada detalle de su hogar.

- toma. - me dió mi teléfono y yo me dediqué a sonreír - solo espero que colabores y me dediques más atención que a tu celular. - completó guiñando su ojo seguido de una carcajada proveniente de él.

- trataré de contenerme. - seguí su juego y él alzó una ceja.

- prefiero que no te contengas. - me miró y yo fruncí el seño confundida.

- espera, de que estamos hablando?.

- de qué crees que estamos hablando?. - seguía mirándome directamente y en mí habitaba el miedo de que pudiera leer mi mente o escuchar lo fuerte que late mi corazón.

Lo miré insegura por su intento de juego de palabras doble sentido.

- olvídalo. - le resto importancia y el sonríe - que haremos primero?.

- te parece acompañarme a preparar algo y luego ver Netflix?. - señala con su pulgar la cocina y yo sigo con la mirada la dirección de su dedo.

- suena bien. - el comienza a caminar y yo sigo sus pasos.

Se detiene como pensando que cocinaríamos pero yo solo me concentro en ver el paquete amarillo que resalta de la bolsa de Walmart.

Una sonrisa genuina aparece en mi rostro y tomo con demasiada libertad la bolsa de felicidad empaquetada.

El me ve y sonríe por mi sincera emoción apoyando su cadera del delicado mesón.

- ¿compraste harina pan?. - pregunto con una sonrisa de niña chiquita y el asiente de la misma manera.

- si, pasé por el super, ví eso y como he investigado un poco de tu gastronomía recordé ese empaque así que lo tomé. - lo señaló sin quitar esa sonrisa y les debo admitir que si no me estuviera viendo yo estaría bricando en una sola pata.

- ¿así que estuviste investigando de la gastronomía de mi país?. - pregunté con curiosidad dándole algo de juego a mi tono de voz.

- en realidad investigué de ti en general. - respondió con sinceridad desviando su mirada para luego regresarla a mis ojos - espero que no me taches de acosador, pero es que eres realmente interesante.

Me dedico a mirarlo con atención, estudiando cada gesto y puedo darme cuenta del pequeño tic nervioso bajo su ceja izquierda.

- todo de ti es nuevo, no sabes lo nervioso que me pones cuando me miras de esa manera, siento que eres capaz de leerme y créeme que no sería muy agradable ver lo que está en mi mente cuando estoy contigo.

Alzo una ceja por tan repentina declaración y no puedo evitar sonrojarme o sentir curiosidad.

- siempre que estamos juntos y me miras me gustaría saber qué pasa por tu cabeza. - le da un pequeño toque a mi frente sin despegar en ningún momento su mirada de la mía.

Estoy estática frente a él, mirándolo, con el corazón a millón, mis manos sudadas y la cara roja como un tomate por tan repentina conversación.

- ¿Te parece si te enseño a hacer arepas?. - cambio el tema y en su cara puedo ver un destello de decepción.

No sabía que decirle, tampoco quiero mentirle o peor, mentirme a mí.

Él asiente y el ambiente se torna incómodo por nuestro silencio.

- Chris. - me giro sobre mis pies y lo veo en su teléfono, no levanta su rostro pero se que está molesto por lo tensa y apretada que está su mandíbula - Chris te estoy hablando.

Lacra Who? | Chris Evans [completa ✔️]Where stories live. Discover now