Aquel pequeño pelinegro estaba sobre los hombros de su padre coreano,los tres caminaban por el parque,Dae comía una paleta de cereza mientras que sus padres iban platicando.
JJ sabia que Seung jamas había sido tan expresivo,pero tener un hijo le sacaba una sonrisa cada tres segundos, a Jean le encantaba la sonrisa del coreano.
Decidieron descansar en una banca mientras el pequeño jugaba con un carrito que había llevado.
-¿fue difícil?-el coreano miro al canadiense sin entender. Mientras que este,tenia la mirada en el pequeño. -la etapa del embarazo.-
-ah,no estuve sólo.-
-un hermano no es una pareja.-
-se que no. Pero recibí su apoyo como si lo fuera.-
Jean lo metido,hace unos días había estado pensando en pedirle matrimonio al coreano,pero no sabia cómo hacerlo.-Seung, tengo mi casa aquí,en Canadá, ahí podemos vivir los tres.-
-¿que?-
-quiero que vivan conmigo.-
Seung lo penso y asintió.-tal vez mas adelante.-
-¿porque no ahora?-
-tengo un trabajo en Corea,estoy de vacaciones pero debo volver.-
-quedense conmigo, no hace falta que trabajes,yo puedo cuidar de ustedes.-
Seung fruncio los labios y negó.-no pienso quedarme en casa y hacer todos los labores,quiero ser mi propio sustento.-
-pero yo...-
-escuchame Jean,no pienso ser un ama de casa,no pienso quedarme en una maldita casa para lavar y cocina. Desde siempre he sido independiente y no puedes llegar a cambiar eso,no tienes derecho.-
-Seung.-
-sere directo,te amaba y me cambiste por una mujer,no puedo olvidar eso por mas que quiera,aun no me siento seguro contigo.-el corazón de Jean se destruyo con esas palabras. Seung se puso de pie y sin mirarlo hablo.-te guste o no,regresare a Corea.-
El pelinegro se marchó llevándose a su hijo con él, en cambio Jean se quedo pensando en el dolor que aun seguía dentro del coreano.
তততততত
Mientras Seung y Dae subían al taxi para ir rumbo al aeropuerto, el pequeño jugaba con un perro de peluche que era su adoración.
-Dae quiero que por favor te comportes en el vuelo.-
-yo no quiero ir a Corea.-Seung observo a su hijo pensando que le diría que quería regresar con su tío, quien se habia quedado en Canadá por asuntos de trabajo. -quiero quedarme con papá Jean.-
-¿quién dijo que era tu padre?-
-mi tío Key.-aquello sorprendió al azabache, pues su hermano parecía odiar al canadiense y jamas pensó que le diría aquello tan abiertamente. -tío Key me dijo que Jean era mi papá,y que ya podíamos estar juntos.-
-¿y a ti te cae bien Jean?-
-pues si. Me consiente y se ve que te quiere... Además,antes de que el llegara estábamos solos,tío Key salia muy seguido.-
-tienes razón.-el extranjero se acomodo y abrazo a su hijo mientras miraba por la ventana. -es probable que ya no lo veamos.-
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¡¡SERÁS IMBÉCIL!!
Romancetras una grandiosa fiesta (y un descuido) nuestro adorado gatito malhumorado quedará con un gran problema... Y puede que no solo sea él.