Mi nombre es Christian Grey, tengo 27 años y soy el reconocido multimillonario y soltero de todo Seattle. En la actualidad, me considero un hombre frío, solitario y amargado. Esto es por dos razones: mi desconfianza hacia las mujeres, y lo otro es...
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'POV' CHRISTIAN.
Si me llegasen ha preguntar algún vez; ¿Qué necesitaría para ser feliz?. Les respondería que no necesito nada porque ya lo tengo todo, pero muy el fondo de mi ser sé que no es así... Me faltaría encontrarme a mí mismo, ese que se perdió y no encuentra ningún motivo en especial por el cual regresar, desde aquel maldito episodio.
Mi nombre es Christian Grey; el reconocido multimillonario y soltero de Seattle, a mis 27 años soy considerado como uno de los empresarios más importantes de todo el país. Y esto se debe a que en mi vida no hay cabida para nada más que no sea mi empresa y mi familia.
Grey House, es lo que es gracias al esfuerzo y dedicación, tanto de los que trabajan muy duro por salir adelante, como también el mío. Mi empresa, que es como mi refugio, donde puedo desempeñar lo mejor que sé hacer. Ser el amo y señor de todo lo que me rodea.
Bueno, dejando de lado lo que son el mundo de los negocios, concentremos en lo más preciado que tengo y es mi familia; la que por cierto, está conformada por mis padres. Carrick Grey, uno de los abogados más reconocidos de todo Seattle; y Grace Trevelyan, la mejor pediatra con un prestigio intachable que pueda llegar a tener en cualquier hospital del mundo.
Por otro lado, están mis hermanos; el mayor es Elliot, que con 30 años puede llegar a ser un mujeriego de lo peor. Sin embargo, eso no quita que sea el mejor hermano que he tenido; luego, le sigo yo que vengo siendo el hermano del medio. Y por último está, mi hermanita menor Mía; de tan sólo 22 años, y es todo un torbellino andante. Mi adoración.
Y por último, les contaré un poco de mi vida personal, y la verdad es que siento que no hay mucho que decir de mi. Lo único, sería que me he convertido en un hombre frío, solitario y amargado. Y puede que en los negocios esto me haya favorecido muchísimo, ya que no estoy acostumbrado a perder. Sin embargo, no puedo decir lo mismo con respecto a mi familia, puesto que lamentablemente estas actitudes que he ido adquiriendo en estos últimos años, me han llevado a lastimarlos muy profundamente. Aunque estoy tratando de trabajar arduamente en remediarlo, ya que aunque no me crean, no siempre fui tan hijo de puta. Y mucho menos, con quienes lo han dado todo por mí y sin recibir nada a cambio.
[...]
Estoy en mi oficina de Grey House, con la mirada perdida hacia el gran ventanal que hay en la misma. Sin poder evitarlo, a mi mente llega todos los acontecimientos desagradables que se dieron en estos últimos 5 años, que sin duda han dado a mi vida un giro tan radical de 360°, desde que conocí al peor error de mi vida. Elena.
A esa despreciable mujer le debo en lo que me convertí hasta el día de hoy. Un hombre que no cree en el amor y vive atormentado por culpa de las pesadillas que tengo de aquel fatídico día, que sin imáginarmelo, cambiaría mi vida por completo.
Su amante, Jack Hyde, me quiso matar, todo por una mujer que no valía la pena.
Lamentablemente, aquel día lo tengo tan presente, que es como si hubiera sido ayer. Y es que han sido muchas heridas, que algunas simplemente parecen ser permanentes. Mi accidente, las consecuencias que trajo consigo el mismo, su abandono; es entonces que en ese instante desapareció todo cariño, que pudo haber hacia ella alguna vez. Ahora, sólo queda desprecio, asco, lástima. Exactamente lo mismo que vi en su mirada cuando me vio postrado en esa cama de hospital...
