¡Oye! ¡Eres hermosa, mí hermosa!.

Capitulo 54: Injusta Realidad.

Ryan.

Mi pelea por el titulo mundial será exactamente en dos semanas, la pactaron para dentro de poco ya que el campeón actual debe entrar a la cárcel a pagar una condena por "intento de homicidio". Se agarró a golpes en una discoteca y el otro hombre lo demando por intento de homicidio.

El campeón actual se ha visto envuelto en muchos problemas y escándalos últimamente y pues... Llego la hora de quitarle ese titulo.

Aunque admito que yo también he estado envuelto en muchos problemas y escándalos, solo espero hacer las cosas bien si gano ese titulo.

Son las tres de la madrugada, Madisson esta dormida a mi lado... En realidad todos están dormidos en la casa.

Dilan tuvo que dormir en el sofá. Por razones muy obvias entre Mia y Daniel.

Llevo desde las doce y treinta de la noche dando vueltas y vueltas en la cama sin lograr consiliar el sueño ya que mi mente no para de recordar y pensar.

Recordar a mi hermana y madre me hace un nudo en la garganta y pensar en que estaría pasando si ellas estuvieran aquí, conmigo.

Flas back.

-¿Y cuantos hijos vas o quieres tener?. -Pregunta mi hermana mientras ambos hacemos abdominales.

-Pues...Quizás solo dos y sino una pareja de gemelos, así como tu y yo. -Digo y ella para de golpe.

-Yo solo quiero tener uno. -Volteo a verla un tanto confundido y aun haciendo abdominales pregunto:

-¿Por que?.

-Por que míranos a ti ya mi, poco a poco vamos creciendo y llegara un punto en el que nos iremos de casa y haremos nuestras vidas por aparte y... me aterra la idea de ya no volver a verte o estar contigo, por eso quiero solo un hijo quizás ninguno...por que no quiero que sienta el mismo miedo de alejarse o perder a su hermano.

Ambos nos pusimos de pie y nos miramos fijamente, sentí ternura y comprendí a mi hermana por que ese mismo miedo que ella sentía... También lo sentía yo.

-Te prometo que aunque tu hagas tu vida y yo la mía por aparte, nada, nunca podrá evitar que tu y yo estemos juntos aunque sea solo cinco minutos. Eres mi hermana y eso no cambiara jamás. -Culmino y luego la abrazo muy fuerte.

-Jamás te dejare solo hermanito, lo prometo. -Susurra en mi oído mientras seguíamos abrazados.

Fin flash back.

Injusta realidad.

Me levante de la cama y salí de la habitación.

Sali y me senté en el escalón que había frente a la casa.

Mire al cielo el cual estaba despejado, la luna alumbraba solitaria calle y las estrellas brillaban como nunca.

-Dijeron que nunca iban a dejarme solo -Susurre aun mirando al cielo e imaginando que mi madre y hermana estaban escuchándome.

-Créeme que nunca te han dejado solo, si, no están aquí pero solo están en diferentes lugares... Nunca te dejaron solo. -Habla una chica que solo había visto un par de veces, la vecina de Madisson.

-Soy Octavia Blass. -Se sienta a mi lado.

Ok....

-Soy Ryan Black. -Digo extendiendo mi mano y ella la estrecha.

Ella iba vestida con un short de pijama, un suéter café y una gorra negra que solo dejaba ver sus labios. Me parecía extraño.

-Si, se quién eres - su voz sonaba temblorosa- Conozco a Madi, tu novia.

-Oye... No se si estará fuera de lugar preguntar pero... ¿Estas bien?. -Pregunto sin dejar de mirarla.

-Yo... Eh... -suspira- Realmente no. -Dice al mismo tiempo que su voz se quiebra por completo.

Rayos... Rayos.

-Vamos chica, cuéntame... ¿Puedo ayudarte o algo así? -Algo no andaba bien. Lo presentía.

-No lo sé, ni siquiera de como ayudarme a mi misma, solo estoy casi segura que ella no sobrevivirá. -Rompe en llanto y empieza a hablar y respirar muy rápido.

-No entiendo, explicate Octavia.

Se pone de pie y yo también. Aún no puedo ver por completo su rostro.

-Estábamos peleando, ella regresó de una fiesta muy ebria y quería tener sexo, yo no quería, estaba muy ebria y estaba casi segura que se había acostado con otras mujeres. Cuando me resistí intentó tomarme por la fuerza y mientras intentaba quitarme la blusa yo logré safarme de su agarre haciendo que me rompiera la blusa y ella en ese momento perdió el control y comenzó a golpearme, me tiro al piso y me pateaba al tiempo que me gritaba todo tipo de cosas. -Se quitó la gorra y ahora pude ver por completo su rostro.

Mierda...

Tenía una gran cortada en su pómulo derecho y su ojo también derecho estaba totalmente inflamado y morado... En resumidas palabras su rostro apenas y era reconocible, era un desastre.

-Dios, no puede ser. -Susurre mientras la miraba atónito.

-Yo tomé un florero y se lo estrelle en la cara, muchos pedazos de vidrio quedaron incrustados en su rostro intenté salir por la puerta trasera de la casa y ella me tomó del pelo volviéndose más agresiva así que tomé un tubo de metal y la golpeé en la cabeza, ella estaba muy mal, apenas si podía caminar, yo corrí a mi habitación, tomé un suéter y ella así como estaba tomó su auto y se fue, no se a donde pero... -me miró y pude ver el terror que tenía- Ryan yo la maté, maté a mi novia. -Dice dando dos pasos hacía atrás y aún con su respiración muy agitada.

Oh, diablos.

-Debes entrar a la casa, debemos curar  esas heridas del rostro para que no se infecten -me acerque a ella un poco más pero ella se alejaba aún más- Octavia, debes escucharme, por favor. - Dije sin dejar de verla y extendiendo mi mano, ella iba a tomarla pero en ese momento Dilan abrió la puerta de la casa.

-¿Qué sucede? -Pregunta y ambos volteamos a verlo, ella aprovecho ese momento para salir corriendo. Yo iba tras ella.

-¡Octavia para por favor!, tienes que escucharme, ella debe estar bien, todo lo hiciste en defensa propia. -Grito mientras corro tras ella y la tomó de la sueta haciendo que pare de correr y voltee a verme.

-La maté, soy una maldita asesina, ¡iré a la cárcel!, Ryan la mate. -Dice y de inmediato la abracé muy fuerte.

Salimos de un problema para entrar en otro, genial... Simplemente genial.