CAPITULO 27

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Y justo como le dije a Harry. Lo hice.

Incumplí mi palabra en el momento en que la siguiente visita a Hosgmeade fuimos juntos y también los otros dos acompañándonos. Tan pronto llegamos terminamos agotados tomando asiento en un espacio de la cueva, al mismo tiempo que Sirius devoraba la comida que trajimos en esta ocasión, un delicioso pollo, jugo de calabaza y demás pastelillos.

Harry no parecía muy alegre que se encontrara presente y con justa razón. Si alguien lo identificaba merodeando por ahí, sería un problema. Aunque era muy improbable si continuaba con su forma animaga.

Discutimos un buen rato de regresarlo por donde vino y al final nadie cedió. Continuaba algo molesto con Harry por haberme hecho sentir mal, aunque en realidad con ambos ya que habíamos prometido permanecer juntos y lo primero que hicimos cuando estuvimos en peligro fue separarnos. Eso aumenta las posibilidades de que quedemos vulnerables y sucedan cosas como lo del lago negro.

Viendo el lado positivo, al menos ya estábamos limando nuestras perezas y parecíamos más amigos que cuando acabo el baile. Sin embargo, aún existía un 'aire' de que había algo de lo que teníamos que hablar y pese a ese sentimiento, ninguno se atrevía.

Vaya Gryffindors que éramos.....

—Ese no es el punto Harry. Han pasado cosas extrañas, el ministerio intenta mantenerlo en bajo pero cada día qué pasa es más evidente.

—¿"La misteriosa enfermedad de Bartemius Crouch"?—leyó Ron de un profeta viejo arrumbado en una de las equinas, junto con otro par de profetas más.

—No se le ve desde noviembre en público.... y no hay una explicación concreta de lo que está sucediendo.

—Lo pone como si ya estuviera cerca de su lecho de muerte—dije con una mueca leyendo la nota de Rita Skeeter.

—Eso le pasa por ser cruel y frío. Mira que despedir a su elfina porque quería estar solo....de seguro se arrepiente.

—Eso no lo sabemos Hermione—rodé los ojos.

—¡Claro que si! Yo misma la he visto en el castillo con Dobby....

—¿Dobby?—pregunte extrañada.

—Larga historia....—respondió Harry.

—Todas esas ausencias de Barty... trabajo muy duro para reinstaurar el Torneo, pero luego también se ausenta... Nada de eso es propio de él—continuo pensativo Sirius.

—¿Conoces a Crouch, entonces? —preguntó Harry.
La cara de mi papá se ensombreció. De pronto pareció tan amenazador como la primera vez que me lo encontré en la casa de los gritos.
—Si —dijo en voz baja— el ordenó que me llevaran a Azkaban... sin juicio.
—¿¡Qué!? —exclamamos todos.

—Como lo escucharon—respondió Sirius—. Crouch era director del Departamento de Seguridad Mágica, ¿no lo sabían?
Permanecimos callados dándole la respuesta.

—Todos pensaban que sería el siguiente ministro de Magia —explicó—. Barty Crouch es un gran mago y está sediento de poder. Ah, no, nunca apoyó a Voldemort —añadió, al ver el rostro de Harry contraído—. No, Barty Crouch fue siempre un declarado enemigo del lado tenebroso. Pero, entonces, un montón de gente que estaba también contra el lado tenebroso... Bueno, no lo entenderían, son jóvenes aún...
—Eso es lo que todos dicen cuando intentan contarnos algo interesante—dijo Ron con un dejo de irritación en la voz, Herms lo codeó.

—Me parece que serán algo que entenderán con el tiempo....—titubeó— además es casi tiempo de que se vayan.

—Sirius...

—No insistas ____, no estoy muy contento que vinieras—me dio una mirada severa, por un segundo me sentí intimidada y después dio pasó el enojo, fruncí el ceño— no me mires así. Me lo prometiste.

—Yo tampoco cambiare mi idea de que deberías mantenerte más lejos—todos parecían incómodos excepto ambos que parecíamos tan inmersos en nuestras miradas (azul y gris), peleándose internamente. Rodó los ojos, no cediendo, pero tampoco con ganas de seguir esta pelea.

—Igual de terca que tú madre...—abrí mis ojos sorprendida, y después retomé mi postura un momento después.

—Bueno, de seguro por parte de ambos—di por terminado el tema.

—Ella tiene un punto Sirius—intervino Harry— intenta mantenerte alerta.

—Eso también para ustedes—lo miro fijamente por unos segundos, negando la cabeza como si supiera algo que nosotros desconocíamos, probablemente fuera más de una.

—Necesito hablar con Harry antes de que se vayan—nos miró al resto— a solas.

Regresamos con más dudas que respuestas, la cara contraída de Harry no ayudaba (Sirius parecía haberle dicho algo importante), además agrégale la nueva incertidumbre de donde se encontraría el tan estricto Crouch, y al menos de mi parte, una punzada en mi pecho. Algo no iba bien mas intente ignorarlo.

Por un momento agradecí, no tener que preocuparme de los exámenes finales de este año gracias al torneo. No obstante, bien lo dije, solo por un momento.

Feliz día chic@s!!! Espero la pasen genial, y esperen el otro cap con ansias que se subirá hoy mismo por la tarde-noche, para no arruinar la sorpresa ❤️😍
Gracias por esperar

La Black que se enamoró de Potter IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora