DESTINADOS. •j.jk•

|•03•|

Salimos de la casa mayor detrás del alfa, el Beta, quien era su hijo, se encontraba en frente, sorprendentemente estaba de pie, solo que la pata lastimada la mantenía en el aire, o mas o menos hasta donde podía levantarla, esa trampa pesaba y su pata se lastimaba aún más, la trampa empezaba a desprender la piel dejando el músculo y parte del hueso a la vista y era doloroso, aterrador y hasta asqueroso de tan solo ver y la sangre por todos lados hacía ver todo como una masacre.

El Beta gruñía a todo aquel que intentara acercarse, algo que no hizo conmigo, tal vez porque no pudo olerme ni escucharme por su concentración en solo el dolor que sentía.

El alfa en nuestro enfrente toma su forma lobuna con un pequeño salto, un lobo de pelaje marrón bastante oscuro y un poco opaco apareciendo en toda su altura frente a nosotros, gruñe y supe que usaba su instinto de mando, ya que su omega temblo ante el gruñido y bajo la cabeza, en cambio el Beta respondió mostrando sus fauces, por lo visto sería bastante difícil controlarlo, pero lo hacia su familia o nadie, pues ni los cuerpos de seguridad pudieron con él.

Namjoon también cambio a su forma lobuna para ayudar, colocándose al lado del Alfa, la diferencia de tamaño era un poco notable, el alfa del Kang era un hermoso lobo imponente a pesar de su estado débil y depresivo. Ambos alfas empezaron a idealizar un plan que puediera funcionar.

—Yoongi, necesitamos que ayudes a inmovilizar al Beta cuando nosotros dos nos coloquemos a sus costados.— Namjoon comparte parte del plan. Alparecer ya tenían un plan, en el rostro de muchos solo se esperaba que funcionara.

Yoongi toma su forma lobuna y se posiciona cerca, Namjoon junto al alfa, que aún no había dicho su nombre se abalanzaron contra el Beta, luchando un poco, el lobo rojizo atrapó una de las patas de Namjoon, todos tomamos precaución listos para cambiar si era necesario, pero en segundos se liberó, el padre empujó el costado de su hijo llamando su atención, cuando este volteo, Namjoon aprovecho la oportunidad para ponerse en su costado libre, dejándolos en el medio de ambos y sin demora Yoongi hizo su parte.

Ante la oportunidad, cuerpos de seguridad junto a enfermeros empezaron a quitar la trampa, era algo difícil, los dientes de aquella trampa empezaron a inscrustarse en el hueso de la pata del Beta, su dolor se podia escuchar en sus alaridos y sollozos, mordía con desesperación el lomo de su padre y hasta el de Namjoon, lo hacía por desesperación de no sentir más dolor, no porque lo quisiera hacer con propósito, al menos que sea el de hacer sentir a los demás un poco del mismo dolor que él sentía.

Minutos de lucha y cansancio escuchamos los chasquidos de los dientes de hierro, la trampa había sido desalamada de la pata del Beta y este con cansancio cayo al suelo ya con su forma humana, estaba completamente desnudo y de tanta pérdida de sangre, cansancio y hasta adrenalina cayó inconsiente.

Su pecho subía y bajaba a pesar de estar inconsiente, todo su cuerpo sudado, su pierna luchaba por curarse sola, pero necesitaría ayuda, enfermeras empezaron a levantarlo y poner una camilla bajo su débil cuerpo lleno de rasguños y quemaduras, cuando subió a la ambulancia su padre pudo calmarse y cambiar de forma.

—En verdad lo sentimos.— se disculpa este cayendo de rodillas al suelo, su esposa corrió a su lado para poder ayudarlo un poco.

—No hay de que disculparse.— Jin camina a su lado para de igual manera ayudar a la omega con el cuerpo de su esposo, ella igual estaba débil y alguien como su esposo pesa bastante.

—Vamos adentro, les daré unas habitaciones donde pueden quedarse y... —Jin quiso seguir hablando, pero el alfa lo interrumpió.

—No podemos aceptar eso, mucho ya hemos hecho, toda su aldea está asustada por nuestra causa, mi hijo lastimó a varios de sus aldeanos y nosotros solo estamos haciendo carga, nos iremos ahora mismo a por él, díganos dónde está el hospital, dejaremos la aldea en cuanto mi hijo esté en mis brazos.— dijo con respiración entrecortada, sentíamos que en cualquier momento caería inconsiente igual que su hijo.