Durante su infancia

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-Mamá... - se escucho un susurro

-Mamá...- decía una voz que ya no tenía esperanzas

-MAMÁ!!- un grito desgarrador finaliza y una hermosa ave llega para finalizar su dolor





Una hermosa niña de rubios cabellos e hipnotizantes ojos tenía una vida normal. Iba a la escuela, tenía amigas y lo más importante tenía una familia.

Lamentablemente todo llego a su fin a la tierna edad de 7 años, cuando paso de estar jugando con sus amigas a ser perseguida por supuesta "brujería".

Sus padres no querían creerlo, ellos sabían que había una pequeña probabilidad que sucediera lo que estaba pasando en estos momentos, pero se negaban a aceptar. Aceptar que su hija tenía un peculiaridad.

-No puedes salir Emma- decía fastidiada su madre, si se le puede decir así.

-Pero mamá, si me pongo piedras en los zapatos no saldré volando y si me corto el cabello no sere reconocida y...- las esperanzas de la pequeña se esfumaron cuando escucho un golpe.

-NO ES NO EMMA- grito su madre- ERES UN FENOMENO PARA LOS DEMÁS, TE QUIEREN QUEMAR VIVA PORQUE PIENSAN QUE ERES UNA BRUJA- cada palabra que soltaba, era como pequeñas dagas incrutadas en el sensible corazón de la rubia.La contraria no dijo nada y como pudo se dirigio a su cuarto como siempre.  

Emma quería salir de su casa, desde que desarollo esa "horrible" peculiaridad sus padres no la dejaban salir; como sus padres trabajaban la dejaban sola la mayoría del tiempo, pero la dejaban como un perro o peor que uno. La dejaban sin comer y sin agua por días, según ellos porque era su culpa que sean juzgados por los demas; siempre estaba amarrada, según ellos porque no debía de escapar hasta que sepan que hacer con ella y lo que alguna vez recebía de amor, ahora es puro odio.

En el pueblo dónde vivia estaban cansados de tener a una "bruja" con ellos, asi que le ofrecieron a sus padres (si se les puede decir así) un trato que no podrían rechazar.

Como todos los días la rubia estaba amarrada viendo hacia la ventana, su vista se dirjia a una hermosa ave de color negro azabache; ella se había dado cuenta que aquella ave siempre iba a visitarla cuando sus padres se iban, bueno eso era lo que quería creer, que había aunque sea alguien que se preocupara por ella.

-Emma- pego un brinco cuando escucho la voz de su padre.

-¿Qué paso papá?- pregunto temerosa

-Solo quiero decirte que fuiste una buena hija- eso preocupo a la rubia- hasta que te convertiste en un fenomeno- lagrimas amenazaban con salir de sus ojos, pero no quería llorar de nuevo, no por ellos.

Pero aquellas lagrimas que quería contener, salieron cuando supo que sus padres la habían vendido al pueblo. Ahora se encontraba amarrada en lo que pronto se convertiría en una hoguera.

Escuchaba las horribles palabras que le decían los que alguna vez fueron sus amigos y lo que más la destozo fue ver como sus padres recibian el dinero por venderla.

-Mamá... - susurro con pocas esperanzas

-Mamá...- decía con miedo cuando vio a la gente del pueblo con sus antorchas

-MAMÁ!!- grito, cuando vio que los bloques de paja abajo de ella estaba ardiendo en llamas y no faltaba nada para que la alcanzaran.

Gritaba que la ayudaran, rogaba que la dejaran vivir, pero nadie le prestaba atención; cuando emepezo a sentir que el fuego estaba cerca de sus pies, sabia que en ese momento era su fin.

Cerro los ojos aceptando lo que estaba por pasar, pero de un momento a otro el ruido y el calor habían desaparecido. 

Abrio con temor sus ojos y puedo ver a una hermosa mujer cargandola, a lado de ella había un tierna chica pelinegra que se veía unos años mayor.

-¿Qué paso?- pregunto Emma

-Estas asalvo mi niña- la voz de aquella mujer le transmitio una paz inmediata- Vendrás con nostras, de ahora en adelante yo cuidare de ti- esas palabras hicieron que soltara gruesas lagrimas.

-No tienes porque sentirte triste, a dónde vamos es un lugar muy bonito y podrás ser tu misma- trataba de calmarla, la pelinegra que estaba a lado de la bella mujer.

-___ puedes llevarnos a nuestro hogar- pidio la mujer mientras quitaba el rastro de lagrimas de la pequeña Emma, que dentro de ella agredecía la llegada de aquella mujer.

Presente

-Oye Emma- la saco de trance su novia -¿Todo bien?- pregunto preocupada

-Si ___ no te preocupes, estaba recordando la vez que cuando te estabas bañando te teletransportarse en medio del cuarto de Olive y ella no te pudo ver a la cara por un mes-

-OYE- le reclamo con un gran sonrojo en su rostro- Estaba medio dormida, sabes que no puedo controlar mi  peculiaridad cuando no estoy despierta totalmente- trataba de excusarse.

-Ajá si- respondía con burla Emma












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