Capítulo 7. El cigarrillo

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Me hace pensar que la ruptura del que fue mi mejor amigo y la que fue su novia es culpa mía ya que Frank nunca besaría a alguien después de cortar con su novia. Todos mis pensamientos me llevan a que mi mejor amiga y mi hermano tienen algo que ver en todo este asunto.

-Lo siento pero no creo que sea bueno que involucremos sentimientos y amistad -digo con una lágrima recorriendo mi mejilla. Aunque una relación con Frank era lo que más quería, me duele.

Frank es alguien que llevo deseando tener desde hace medio año pero creo que ahora es que acabo de darme cuenta de que nosotros nos llevamos bien y somos el uno para el otro tan solo como amigos. Tenemos un grupo de amigo en común y si nosotros salimos y más adelante ya no nos entendemos y decidimos dejarlo estar, aunque los dos seamos lo suficientemente maduros como para aparentar estar bien cuando salgamos con el grupo, todo podría romperse. Somos buenos amigos, claro que lo somos. Y como todo, debemos dejar a un lado estos sentimientos que han aflorado en nosotros por volver a llevarnos realmente bien.

Sin verla llegar, Adahra se presenta en la puerta de la discoteca. Luce perfecta con un vestido blanco muy parecido al mío, con unos tacones y una cazadora rosa de piel. En su mano derecha lleva el móvil, objeto al que viene mirando hasta que se percata de que somos nosotros y decide meterlo en el bolsillo de la chaqueta para unirse a nuestra conversación.

-¡Hola, mi niño! -le dice a Frank sonriendo y abrazándolo. Pronto veo que sus intenciones son darle y un beso en los labios y miro hacia otro lado.

Adahra arrastra las palabras y seguramente no es el primer local que visita en toda la noche. De eso puedo dame cuenta también por su manera de andar.

Cierro el bolsillo de mi chaqueta donde ha guardado la caja de "Malboro" antes Frank y me dispongo a entrar de nuevo. Mis sentidos reciben un escalofrío al percibir que Frank me está llamando, pero como antes no me giro a verlo, simplemente pongo mi mente en blanco e intento olvidar el patético intento de beso de Frank en la puerta de esta discoteca que no pisaré más a menos que venga sola con Sam.

Mi mejor amiga se encuentra subiendo unas escaleras que conducen a la zona VIP de la disco a la que voy a suponer que los ha subido el camarero con el que está liada. Yo, muy a mi pesar subo las escaleras y saludo a los chicos con la mano.

-¿Media hora fuera no es mucho, Gabi? -me guiña el ojo mi mejor amiga.

-No quiero hablar de eso ahora, mejor te lo explico mañana... -me siento en un sofá que hay a su lado y cruzo mis piernas.

Los chicos se encuentran pidiendo algunas bebidas y yo, como una idiota que ahogará sus penas en alcohol para no recordar la bochornosa situación que acaba de ocurrir, me sumo a ellos y pido un vodka caramelo.

-¡Para arriba, para abajo, para el centro y para dentro! -todos siguen mis movimientos con sus copas y chupitos.

Sé que me estoy comportando como una cría intentando olvidar hasta quién soy por culpa de un chico y encima con alcohol pero la verdad es que se está tan bien no sabiendo quién eres que no quiero dejar de estar así.

-Sé que si estás así es por culpa de Frank -me dice mi mejor amiga al oído.

-Eres... demasiaaaaado lista -le digo yo dándole un sorbo a mi copa mientras me río por lo bajo.

-Trae, dame eso, nos marchamos a casa ahora mismo -me dice arrebatándome la copa de la mano de un golpe.

-Eres muy aburrida Sam, nos podríamos queedar aquí con tu amiguito -digo refiriéndome al camarero-. Además es muy lindo -guiño el ojo de forma indiscreta.

Descúbreme (RESUBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora