13

13.5K 1.6K 721
                                    

- ¿Qué mierda es esto?! - gritó furioso aventando la hoja en la cara del menor. 

- Jimin, ¿Qué…? ¿Qué pasa? 

El otro claramente no entendía nada. Tomó la hoja, la miró y entonces comprendió. 

- ¿Cómo te atreviste, Jungkook? ¿Cómo pudiste? 

Jimin estaba enojadísimo. Tanto así que ni siquiera podía llorar. Tenías las lágrimás como atoradas en sus ojos pero no las podía dejar salir aún. 

- Déjame explicarte, amor. 

- ¿Explicar qué? Querías que confiara en ti, y me encuentro con esta mierda. ¿Qué te pasa? 

Todo, absolutamente todo lo que le había contado desde el inicio al menor estaban detallados en esa hoja, en una especie de proyecto donde Jungkook describía los traumas de Jimin, sus posibles orígenes y las consecuencias que le produjeron. Hablaba de él como si fuera un paciente, una persona cualquiera, un enfermo. 

- No es lo que tú crees. - intentó explicar Jungkook. 

- ¿Ah no? Es mi historia esa de ahí. Todo lo que te he contando, maldito. ¿Lo has usado para pasar tus putas materias?! No lo puedo creer!!

- No es así. Sí, es tu historia, pero no hablo de ti. No nombro tu nombre en ningún lado. Yo...quería contarte de esto. Iba a hacerlo, te lo juro. 

- ¿Por qué mierda hiciste eso? No entiendo! - continuó gritando furioso. Jimin pedía respuestas desesperado pero al mismo tiempo no quería escuchar nada de lo que el menor dijera. 

Su mundo entero se había venido abajo.

- Porque quiero ayudarte. Quiero entenderte y quiero ayudarte como de verdad necesitas. He estado trabajando en eso con ayuda de un profesor. Jimin, quiero ser capaz de poder ayudarte, a ti y a otras personas con tu mismo problema. Pero nadie sabe de ti, jamás te traicionaría así. Créeme. 

- No importa, no importa que no me nombres. Tú...me usaste. ¿Eso has estado haciendo todo este tiempo? ¿Estudiándome, analizándome? 

- Claro que no, cómo piensas eso. - Jungkook trataba de mantener la calma pero también empezaba a alterarse. 

Tenía que hacerle entender. No quería perder al rubio. 

- Todo, todo. Has escrito todo, hijo de puta! - exclamó Jimin mientras recordaba lo que acababa de leer. Hasta incluso estaba redactado lo más reciente, el ataque de miedo que le dio volver a su ciudad natal. 

Pero eso no fue lo peor. 

La palabra "abuso" cuando leyó la parte que hablaba del esposo de su madre, le había caído muy mal. 

- ¿Eso crees? ¿Que fui violado? ¿Y que por eso estoy tan mal de la cabeza? 

- Jimin, ya basta. Escúchame, por Dios. - suplicó el pelinegro. Intentó acercarse pero el mayor retrocedió. 

- No, ni te atrevas a tocarme. ¿De verdad crees que fui abusado? 

Jungkook calló un momento. ¿Qué decirle? ¿Cómo explicarle sin que se alterara más de lo que ya estaba? 

- Jimin, eras un niño…- dijo entonces. - Ese hombre se aprovechó de ti. Tienes que reconocerlo. 

El rubio rió con ironía. 

- Te dije que yo lo provoqué, que fue consentido. ¿Por qué cambias los hechos? 

- No importa lo que hiciste! - exclamó - Tenías 14 años, estabas en un hogar disfuncional, no sabías lo que hacías. No pudiste decir que no, pero tú sabes bien que no querías. Jimin, sé que en el fondo tú lo sabes. No importa que no te haya forzado, ese tipo te manipuló, rompió tu inocencia, se aprovechó.

Adicto - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora