Supergirl Returns [SuperCorp] PAUSADO

Capítulo 3

La chica de acero, se mantuvo con un rostro neutro al escuchar su nombre real. Si le sorprendió, no lo demostró.

-Llamame como gustes, Lee-

"Lee, Lee, Lee" A Lena comenzaron a sudarle las manos después de escuchar el cariñoso apodo que Kara le había puesto en el pasado.

Supergirl bajó y caminó lentamente en dirección a Lena.

Está última, tragó saliva y se apresuró a tomar el resto de su copa.

- Está noche, fui a tu oficina, Sam me dijo que te habías ido temprano. Fuiste a una cena con Jack - hizo una larga pausa - tu novio.

Aunque trató de que eso último, no sonará como una acusación, así pareció.

Luthor, dejó su Copa a un lado y tomó una gran bocanada de aire.

- Si, es cierto - respondió

Kara asintió lentamente, y a continuación, le extendió la mano.
- acompañame - le dijo.

Ante la duda de Lena, Kara se apresuró a decir - No iremos demasiado lejos, no te preocupes. Sólo quiero mostrate algo- le sonrió suavemente.

Sin poder negarse ante ella, se quitó los zapatos y tomó la mano de Supergirl.

-¿Estás lista?-

Lena la miró a los ojos.

-Si-

Comenzaron a elevarse lentamente, Kara tomó de la cintura a Lena, y ella, enredó sus brazos alrededor del cuello de Kara.

Lena habría mentido si dijese, que volar de esa forma, no era espectacular o incluso romántica. La primera vez que lo hicieron, Lena tenía clavados los dedos en los hombros de Kara, hasta el punto de volverse blancos.

Recordó fugazmente lo que Supergirl le dijo en ese momento.

- Jamás tengas miedo, siempre estaré cerca de ti-

Y con esa promesa, Lena le había confiado su vida, y también, secretamente  su corazón.

- Cierra los ojos, y dime, ¿qué escuchas?-

Lena lo hizo, abrió los ojos unos segundos después y miró a su alrededor. Estaban, probablemente a unos 25 pies de altura.

Era una vista fantástica.

-Nada, no escuchó nada -

-Yo escuchó todo, los puedo escuchar a todos - desvío la mirada - cuando quiero estar sola para pensar en algo, subo aquí. Me da una extraña paz, a pesar de los susurros a mi alrededor.

Ambas se miraron fijamente a los ojos, y compartieron una sonrisa. Una que reflejaba también dolor, que les había causado la separación. Una separación que a su vez, rompió sus sueños.

Kara tomó la mano de Lena, y la inclinó de modo que quedará en forma vertical , poso suavemente la mano en su cintura, y de esa forma, regresaron a la casa de Lena.

Una vez que estuvieron de nuevo en el porche, la ojiazul dijo:

-Escucha, Lena...

Ella negó con la cabeza y levantó ambas manos.

- No digas nada - cerró los ojos - no creo que sea el momento más adecuado para hablarlo. Nos vemos luego

Tomó sus zapatos, y sin decir más, se marchó.

                        *** *** ***

- Bien , Señores. ¡A trabajar!- gritó Alex con voz firme