TOUCH STARVED ↻ peter parker © [+18]

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'such a desperate little sub'

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   El fuerte olor a desodorante llenó el borde de tu nariz como una ola firme, ahogándote en una sensación de vibra veraniega, el calor corriendo hacia tus mejillas mientras la adrenalina llenaba tu torrente sanguíneo. Peter se había acostado sobre tu pecho, después de hacerle saber que estaba bien que colocara su cabeza donde sus ojos habían estado mirando. Sus labios descansaban contra el lado interno de tu pecho derecho, metidos debajo de la tela de tu camisa mientras su cabello estaba mate contra tu cuello húmedo, ambos pechos se elevaban en una silenciosa sinfonía.

  Por instinto, tu mano trazaba suavemente círculos reconfortantes a lo largo de la musculosa espalda de Peter, sintiéndola subir y bajar mientras respiraba más profundamente con cada inhalación. Tenía los ojos cerrados, absorbiendo tu aroma que era tan bellamente embriagador, haciendo que su sangre subiera, corriendo por su cuerpo como una euforia significativa. De repente pudo sentirte, y no era un sueño, realmente estabas allí debajo de él.

"¿Te sientes mejor?" murmuraste suavemente, estableciendo el tono y el ambiente. Era tranquilo, como el sutil murmullo de una pequeña ola en un río, o un charco de agua de lluvia cuando está muy perturbado. En verdad, sí, Peter se sentía mucho mejor, pero no quería que esto fuera algo único... y no estaba seguro de cómo decírtelo. Simplemente murmuró contra tu piel, asintiendo ligeramente con la cabeza escuchando su cabello crujir contra tu camisa y hundirse más en ti, amoldándose a la sensación de tu mano recorriendo su espalda.

"¿Peter?" Un suave susurro salió de tus labios, arqueando tu espalda sólo un poco para que él recibiera el mensaje de animar su cabeza, y lo hizo, esos ojos de cierva se encontraron con los tuyos mientras lo mirabas. Había una pregunta en su mirada mientras se reajustaba a la sensación de que le quitaban el brazo de la espalda. Tus dedos eran delicados, suaves y extrañamente fríos cuando se posaron en su barbilla, acercando su rostro cada vez más hacia ti. Sus ojos se movieron entre los tuyos y tus finos labios, sintiendo el rubor de tu sonrojo mientras se presionaban.

  Sus narices chocaron juguetonamente bajo el manto de lujuria que se estaba instalando entre ustedes. Peter se levantó en unos segundos, plantando sus brazos al lado de tu cabeza mientras os ahogabais juntos en el sabor del otro. Era dulce, como el chicle, pero también muy sencillo. No había mucho en él más que la mezcla de todo lo que amabas, un sabor del que fácilmente podías enamorarte. Y tú; estabas por todas partes, como bailando a lo largo de los bordes de un arco iris.

"¿Crees que puedes volver a ir por mí, Petey?" La respiración de Peter se tambaleó en su garganta cuando sintió que acariciabas ferozmente su ya creciente semi-erección. La tela de su sudadera todavía estaba húmeda por correrse hace unos minutos, pero no pareció importarte. A pesar de que él estaba predominantemente en la cima, tú seguías siendo la que tenía el control, y eso le encantaba.