P.D⨟⏤ 阿

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                                    Maraton 2∫2
       
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Los giros que daba la vida tenian sorprendida a Yuqi, quien se encontraba sin creer la imagen que tenia ante sus ojos, su prima mas pequeña en brazos de la rubia jugando con las pinturas de su madre.
Observava aún sin creer como aquella chica la cual se encargo de ser su dolor de cabeza desde el año pasado molestandola e insultandola cada ves que podia se inclinaba hacia delante para dejar que la niña frente a ella pintara sus mejillas con una sonrisa sincera plasmada en sus labios.

Sus ojos se abrieron sorprendida y enternecida al ver un puchero formandose en los labios de Soyeon.

-  ~Unnie no seas mala, anda deja que te rasure la cabeza. - La peticion de la niña hizo reir a Soyeon, y por primera ves desde que conocia a la rubia Yuqi escucho una risa sincera y melodiosa.

Suspiro y miro su reloj de muñeca, se sorprendio al ver que se paso mas de 30 minutos observando a Soyeon, movio su vista a ellas percatandose de que ahora la rubia la miraba a ella con la misma sonrisa que antes, un remolino en su estomago se sintio al instante.

Se movio de su lugar y se adentro mas a la cocina a buscar la vandeja de comida que al principio vino a buscar, la agarro y salio de la cocina.

- Yuqi mira mi obra de arte. - Dijo su pequeña prima apuntando elegantemente la cara de Soyeon. - No esta completa por que Unnie no me dejo raparla, pero bueno...

- Muy bien Yeeun ve a jugar a el patio que Unnie y yo tenemos que estudiar. - Junte todo el maquillaje del sofa y los puse dentro de la cartera de maquillaje.

- ¡¿Yeeun donde esta mi maquillaje?! - La voz estruendosa de mi madre asusto a la pequeña haciendola temblar.

- Oh oh... - Agarro la pequeña cartera y desaparecio de nuestras vistas.

- Bueno... - Sonrei y me gire para estirarme y alcanzar nuestras mochilas que estaban en el sofa individual de a lado.

Sin mediar palabra alguna comenzamos ah completar el trabajo, nos dividimos las preguntas y si necesitabamos ayuda nos consultabamos entre nosotras.
Me sorprendia la concentración que tenia Soyeon, sea lo que sea que haya pasado para que estuviera asi de tranquila y apaciguada espero que dure mas tiempo asi.

- Yuqi ¿donde-... - La voz de mi madre entrando a la sala llamo nuestra atención, su vista se clavo en Soyeon quien sonrio nerviosa.

Cuando llegamos mis padres estaban descansando asique no nos vieron llegar.

- Hola... - Saludo sonriente a la rubia a mi lado. - ¿Amiga nueva? - Agrego ahora hablandome a ami.

- Si, y estabamos haciendo un trabajo juntas... - A punte a las ojas esparcidas en la mesa, ella sonrio y observo a Soyeon la cual se encontraba jugando nerviosa con sus dedos.

Cerre los ojos sabiendo lo que venia ahora, como era costumbre mi madre siempre soltaba la tipica ola de preguntas a las amigas o amigos nuevos que traia a casa, suspire y conte hasta tres, rezando para que por lo menos esta ves no pasara.

- ¿Vives por aqui cerca? Nunca te vi por el barrio. - La joven china nego bajando su mirada sabiendo lo que venia.

- No señora, soy de otra zona, esta algo lejos... - El tono suave y delicado que utilizo Soyeon hizo que Yuqi se llevara una grata sorpresa teniendo en cuenta como le hablo las ultimas veces que se vieron.

Y asi fue como se desencadeno una ola de preguntas abrumadoras y vergonzosas para Yuqi, ya que su madre tenia la mala costumbre de soltar informacion de mas, terminando de revelar datos penosos de su infancia.

- Si quieres tengo fotos a manos, ¿te interesa verlas? - Los ojos de Yuqi se levantaron en alerta.

- Ya mamá, este trabajo es largo tenemos que seguir estudiando. - Dijo finalizando la conversación mirando amenazante a su progenitora.

- Bueno, las dejo para que sigan, de todas formas, ¿piensas en quedarte a cenar? - Su pregunta sono mas a suplica que a una pregunta.
Soyeon dudo en si aceptar hasta que se le dio por mirar a la joven a su lado
En el fondo queria saber mas de ella aunque no lo admitiera.

- Si, si no es molestia... - Miro de reojo el ceño levemente fruncido de Yuqi, sonrio traviesa sabiendo que estaba molesta.

- Bueno me retiro ire a preparar la comida. - De un salto alegre se paro y se retiro.

Una carcajada baja salio de sus labios, su mente trajo el recuerdo reciente de las preguntas y respuestas de la madre de Song, sin dudas la china era toda una caja de sorpresas.

- ¿Te comiste un payaso en el desayuno o que? - La vista de Yuqi estaba clavada en el libro frente a ella pero su atencion se mantenia en Soyeon.

- ¿Asique aún le tienes miedo a la oscuridad? - Ignorando el comentario de la pelinegra ataco recordando cada una de las cosas dichas por la madre de la china.

- S-si... - Aunque tratara de disimular su pena y vergüenza, sus mejillas rojisas la delataban y Soyeon lo habia notado. - ¿Algun problema con eso? - Expreso a la defensiva.

- Es tierno... - Dijo en un susurro suave, la piel de Yuqi se erizo al escuchar dicho comentario, su vista se levanto y miro algo apenada a la chica.

- ¿Como...? - Su cuerpo se relajo al ver la expresion relajada y poco dura de Soyeon.

- Eres tierna, me pareces tierna... - Se corrigió al final, un leve sonrojo asomandose en sus mejillas.

Sonrio ampliamente ante su confesion, ¿que le estaba pasando a aquella chica ruda? ¿por que este cambio tan drastico? Oh deberia preguntarse, ¿que le estaba pasando a ella? ¿por que le estaba gustando este cambio?

- ¿Que te pasa? - Pregunto ladeando su cabeza curiosa y emocionada.

- No pasa nada, solo que quiero cambiar... - Suspiro al terminar la frase, miro sus manos y poso su vista en su acompañante. - Se que te eh tratado mal, fui muy impredecible e irrespetuosa, tan solo quiero hacerte saber que...

Movio el libro de sus piernas y se acerco mas a Yuqi, tomo una de sus manos suavemente y por arte de magia una vibra inusual pero placentera inundo su cuerpo a la misma ves que sentia a la pelinegra temblar ante el contacto de sus manos.

- Quiero que... - Trago nerviosa los restos de saliba de su boca y ante la atenta mirada de Yuqi la cual contenia un brillo de esperanza en ellos hablo. - ... Quiero... hacerte saber que estoy interesada en ser tu amiga. - Una fuerte cachetada de parte de su subconsciente resono en toda su cabeza, mintio descaradamente una ves mas, ¡eso no era lo que ella queria!

La mirada de la pelinegra fue apagandose para darle lugar a una sonrisa algo chueca y triste.
Suspiro y asintio algo decepcionada ante la declaración de Soyeon.

- Ahm, si, creo que debemos hacer las pases, supongo que ser amigas es la solucion. - Agarro sus lapices y miro por ultima ves aquellos ojos para seguir con su trabajo.

Ambas no expresaron ninguna otra palabra, aunque un sentimiento de decepcion y miseria las inundo por completo, Yuqi perdio toda esperanza de seguir intentando o dandose ilusiones de algo mas... Por que sin saberlo ese sentimiento de odio fue cambiando de acuerdo el tiempo pasaba aunque no siempre se podia conseguir un final feliz y tal ves este no era uno de esos.

Aunque la decepcion las dominara, el calido sentimiento de sus manos juntas se negaba a desaparecer, no querian sentir el frio de la lejania, por eso ambas permanecieron juntas hasta que la rubia tuvo que ir se.

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