Destino ©

Capítulo 24

Diego abrió los ojos, reconociendo de inmediato el lugar en el que estaba. Sintió una ligera presión sobre su pecho y cuando bajó la mirada se encontró con una intensa melena roja que caía sobre su piel. Apartó el cabello que le impedía ver el rostro de aquella mujer y se sintió el hombre más afortunado de poder compartir un sentimiento tan especial con una mujer tan hermosa como lo era ella.

Y entonces supo que tantas decepciones y tanta espera había valido la pena, la vida le había recompensado todo en una misma persona y no podía pedir nada más que tiempo para poder disfrutar de su amor.

Escuchó como ella suspiraba y segundos después abrió los ojos para mirarlo aún somnolienta.

Christopher: hola...- susurró galante.

Roberta: hola...- dijo con una enorme sonrisa- él se inclinó un poco y capturó sus labios en un corto beso, al separarse ella lo miró y sonrió intensificando el abrazo- oye si eres de verdad...- dijo entre besos con voz adormilada, él sonrió haciendo una mueca.

Christopher: si... aquí estoy... y no pienso irme a ningún lugar.

Roberta: es que pensé que estaba soñando otra vez- dijo recostándose en su pecho.

Chris: ¿otra vez?...

Roberta: ¿dije otra vez?...- él asintió y ella se ruborizó y comenzó a tartamudear levemente- tú... ¿te cuento algo pero no te espantas?- dijo cubriendo un poco su rostro.

Chris: dime...- ella suspiró.

Roberta: yo... es que... debo confesar que anoche no fue la primera vez que yo hice el amor contigo- él la miró confundido sin perder la sonrisa de su rostro.

Chris: ¿Cómo?... y ¿yo no estaba la otra vez?

Roberta: no...

Chris: ¿entonces?

Roberta: te soñé...- dijo cubriendo su rostro con la manta.

Él la miró sorprendido y ambos comenzaron a reír. Christopher tomó el borde la manta y lo apartó para ver su rostro.

Roberta: no sé qué estaba pensando, lo que pasa es que tú estabas en la ciudad y yo no podía dejar de pensar en ti y... pues pasó- habló rápido antes de soltar una leve risita avergonzada.

Christopher: y ¿Cómo estuvo?... ¿bien?

Roberta: ufff...- dijo feliz.

Christopher: ¿uff...?- preguntó sonriendo- ¿mejor que ésta?

Roberta: ninguna es mejor que ésta...- él la besó sonriendo.

Christopher: ¿tú crees?... yo creo que aún se puede mejorar un poco- dijo coqueto- ¿lo intentamos?

Roberta: todo sea por aprender...- dijo en medio de risas mientras él volvía a colocarse sobre ella.

Un par de horas después
Christopher estaba abotonando su camisa cuando Roberta salió del pequeño baño que había en la habitación, caminó de rodillas sobre la cama y abrazó a su novio por la espalda para después besar su mejilla, Chris sonrió levemente y tomó su mano para dejar un leve beso en ella.

Roberta: ¿de verdad tenemos que regresar?

Chris: No regresamos en toda la noche, deben estar preocupados en la hacienda- se giró y besó sus labios levemente- ¿no quieres regresar?

Roberta: no es eso... me gusta la hacienda pero me encanta estar aquí a solas contigo.

Chris: supongo que hemos estado un poco distanciados estos días... con el viaje y todo el trabajo de la casa...