Jel x Riinu

77 16 16
                                    

El silencio incómodo se había hecho dueño del pequeño espacio en el auto. En el asiento del conductor, un joven de cabellos naranjas y orbes verdes conducía en silencio, siendo fulminado por la mirada de la persona que ocupaba el asiento del copiloto. Riinu casi asesinaba al mayor con la mirada, dejándole en claro que no deseaba pasar tiempo con el.

—Será un largo trayecto.—suspiró Jel con una expresión de cansancio y tratando de no encontrar su mirada con la del menor.

(...)

¿Cómo habían llegado a aquella situación? Pues el comienzo de todo se remontaba a una horas antes, justo en la mañana de un soleado sábado. Tras haber lanzado su segundo álbum, el líder de la banda decidió reservar una cabaña en las afueras de la ciudad, para llevar a cabo una pequeña fiesta allí. Querían celebrar el éxito de su segundo álbum, pero no querían hacer algo ostentoso, solo una pequeña reunión, unas cervezas y quizás karaoke. Solo ellos seis.

Pero el problema apareció ante ellos a la hora se subir a los autos. Los únicos miembros con licencia de conducir eran Satomi y Jel, además solo pudieron rentar dos coches pequeños y uno de ellos venía con el maletero averiado. En uno podían ir cuatro miembros y en el otro debían ir los otros dos miembros restantes y el equipaje en los asientos traseros.

Finalmente Nanamori propuso decidir los grupos mediante un juego, el muy conocido piedra papel y tijeras. Tras varios intentos los equipos fueron decididos. En el primer coche estarían Satomi condición, Nanamori, Root y Colon, mientras que en el segundo irían Jel y Riinu. El pelirrojo no demoró en expresar su descontento, Jel siempre le trataba de coquetear y esto realmente lo molestaba. Después de una larga charla de convencimiento por parte de Nanamori y otros de los miembros, Riinu finalmente decidió ir con el pelinaranja.

(...)

Y así es cómo habían llegado a aquella incómoda situación. El camino a recorrer era largo, a lo sumo demorarían unas cinco horas, por ello Jel había intentado entablar conversación con el pelirrojo e incluso le contó sus mejores chistes. Sin embargó, el chico más bajo le mostraba su actitud más tsundere.

Jel se había dado por vencido tras la primera hora y ahora se limitaba a conducir en silencio. Se conocían desde hace varios años, aún así su relación siempre había sido complicada. Jel le coqueteó desde el primer momento en que lo conoció y Riinu lo ignoraba o lo ponía en su lugar con alguna frase cortante. Aún así, eso no fue obstáculo para que el mayor se enamorará completamente del pequeño pelirrojo.

—¿Aún falta mucho?—preguntó el menor de los dos sin apartar la vista de la ventanilla.

—Solo ha pasado la primera hora.—respondió el de orbes esmeralda mirando la hora en su teléfono.

—Los demás se han adelantado mucho, ¿No puedes ir más rápido?—bufó el de cabellos rojos cruzándose de brazos.

—No creo que sea una buena idea, podrías...—empezó a hablar el mayor siendo interrumpido por el otro.

—Solo acelera.—gruñó y se hundió en el asiento del copiloto con le ceño fruncido.

Jel suspiró pesadamente y aceleró un poco, esto los acercó más al coche donde los otros miembros iban. Riinu lo miró nuevamente y Jel supo que quería que acelerara aún más y pasará a los otros. El mayor no quería tener que escuchar los berrinches del pelirrojo, así que volvió a acelerar nuevamente, pasando el otro auto. Riinu se vio un poco feliz, era como si le hubiera ganado en una carrera a sus amigos.

—¿Ves?¡Les ganamos!—sonrió sacudiendo el hombro de Jel, el cual a sintió un poco más aliviado ante el cambio de humor de su pequeño amigo. Efectivamente se habían alentado mucho, tanto que ya no lograban ver el otro auto. Pasaron otros treinta minutos en que el menor solo se limitaba a mirar el paisaje a través de la ventanilla.

Strawberry Prince One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora