Capitulo 5

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...Noches más tarde, Xiao Zhan salió de la ducha y se percató de que sus problemas de cálculo estaban resueltos sin él haberlos tocado. Con un suspiro, gritó con voz ahogada:

–¡Yibo !–y se sobresalto cuando Yibo apareció dando saltos por el pasillo había él, casi al galope.

–¿Sí?– su sonrisa era tan amplia que ocupaba la mitad de su rostro.

–¿Has hecho mis deberes ?¿Otra vez?–La sonrisa de Yibo se atenuó.

¿Se... supone que no debía ?.

Xiao Zhan llevó la palma de la mano a su cara.

–No. Nunca. Por favor, no vuelvas a hacer mis deberes, ¿de acuerdo? Tengo que aprender a hacerlos sin tu ayuda.

–Pero yo solo quería...

–No– dijo Xiao Zhan con seriedad–. Déjalo. No toques mis deberes . Te prohíbo que te acerques a ellos.

Castigado, Yibo descendió la mirada hacia sus manos, en una postura de sumisión perfecta.

–Está bien, lo siento– dijo con facilidad, asintiendo con la cabeza–. No lo haré nunca más.
Yibo no tocará los libros  de Xiao Zhan nunca más.

Solo hablaba así cuando intentaba que algo le entrase en la cabeza, así como cuando Xiao Zhan le hacía memorizar su número de teléfono por si algo sucediese en su ausencia.
Para él era complicado enfadarse de verdad con Yibo quien, de nuevo, síempre «quería ayudar» cada vez que interfería en su vida.
Con un suspiro y un «está bien », Xiao Zhan colocó su mano sobre la de él.
Esa fue la primera vez que se tocaron.

Se sorprendió al sentir un ligero calor procedente de Yibo y permitió que este tomara su mano y la examinará a su gusto.

Yibo acercó la mano de Xiao Zhan hacia la luz y luego tiró de cada uno de sus dedos, examinando los huesos bajo su piel.
Cuando Yibo rozó accidentalmente su muñeca, Xiao Zhan se extremeció e intento arrebatarle la mano.

Yibo alzó la mirada:

–¿Qué pasa ?¿Te duele?

–No, no... Hace cosquillas.– Xiao Zhan se aclaró la garganta, de pronto avergonzado.

–¿Cosquillas?– repitió Yibo–. ¿Es agradable cuando algo hace cosquillas?

–No... No, exactamente.– Xiao Zhan intentó soltarse de nuevo cuando Yibo recorrió experimentalmente las venas de su muñeca con el pulgar–.

Me resulta incómodo  y me hace reír.

–¿Pero reír  no significa que eres feliz?– Yibo sonrió–. ¿Tener cosquillas te hace feliz?

– Tal vez  a otras personas, pero no a mí. – Yibo le permitió retirar la mano, con el rostro lleno de concentración–. Tener cosquillas está... bien– Xiao Zhan suspiró–. Los nervios situados bajo la piel se excitan cuando se les toca de cierta forma. Hacen reír a mucha gente, pero a mí me ponen nervioso. No me gusta que la gente me toque.

–Oh...–los ojos de Yibo se agrandaron–. Lo siento, no quería...

–No, no, no pasa nada...– dijo Xiao Zhan, levantando  las manos–. Dejemos de hablar sobre eso, ya te haz disculpado lo suficiente por hoy.

Cada vez era más y más difícil explicar los procesos naturales del cuerpo que Xiao Zhan daba por sentados.
Yibo sabía que era la felicidad y cuáles eran sus síntomas, pero tenía problemas con otras emociones más complicadas, como el miedo o la ansiedad.

Xiao Zhan podía recitar de carrerilla tantas emociones como conocía y cuáles eran sus consecuencias físicas, pero Yibo sólo movía la cabeza, sin entender muy bien por qué los humanos sentían ciertas cosas.

–Quiero ser humano... –confesó. Xiao Zhan levantó la vista de sus apuntes de historia, cerrando el libro.
Era tarde y Yibo estába a su lado en el sofá, jugueteando con un cubo de rubic que Xiao Zhan había encontrado en su armario.

–¿En serio?

–Todos los que venimos de donde yo vengo quieren serlo.– dijo en voz baja. Siempre hablaba así por la noche.
Xiao Zhan no había tratado de convencerle de que hablase más alto; pensaba que quizás Yibo creía que perturbaba la paz de la noche si lo hiciese.

–Se que Hao Xuan quiere ser humano también– prosiguió Yibo –. Pero él lo disimula mucho mejor que cualquier otro. Ser humano es...
Realmente no entiendo por qué me fabricaron, Zhan Ge.
A veces me miró y te miro y creo que no somos tan diferentes.
Entonces, ¿por qué tú naciste siendo humano y yo no?
Siento escalofríos cuando dejas la ventana abierta, pero nunca siento frío. Me siento mal, muy mal, cuando me gritas, pero no te tengo miedo ni me pongo «nervioso» la siguiente vez que te veo.
Sólo quiero que seas feliz y serlo yo también. Ser feliz es lo único que... entiendo de verdad de ser humano.
¿Es eso lamentable?

–No– Xiao Zhan se frotó la barbilla, pensativo–. No es lamentable. Nosotros, los humanos , intentamos alcanzar la felicidad y conservarla a  lo largo de nuestra vida. Si tú puedes lograrlo fácilmente, entonces tenemos mucho que aprender de ti.

–Pero mi felicidad... ¿ es real?– Yibo descendió la mirada –. Se que mi felicidad no es... no es la felicidad humana, así que cuando estoy feliz, ¿lo siento con la misma intensidad que tú?.
Xiao Zhan no sabía que decir.

Por supuesto, él también se había formulado esas preguntas hasta cierto punto, pero ni una sola vez se le había cruzado por la mente la idea de que Yibo también tuviese las mismas dudas.

Cuando Yibo alzó la mirada, el brillo artificial de sus ojos parecían un poco más tenue de lo normal.

Xiao Zhan le sugirió que fuera a recargar sus baterías antes de que se quedase sin energía y el accedió, saliendo a trompicones del sofá para dirigirse a la caja que Xiao Zhan había colocado en la esquina de su habitación.

Xiao Zhan lo siguió en silencio, observado como se introducía en la caja y cerraba la puerta. Un leve resplandor irradió desde ella cuando Yibo empezó a cargarse, acompañado de un suave zumbido que arrulló a Xiao Zhan en un sueño profundo.





Continuará...


꒰⑅ᵕ༚ᵕ꒱˖♡Espero les gusta la actualización.
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Recuerden es importante leer todo el capítulo para comprender  el mensaje final de la historia. Sin más . Gracias por su lectura.
💚❤️

♡~Absolute Wang Yibo~♡ ~[YiZhan]FinalizadoWhere stories live. Discover now