♡~Absolute Wang Yibo~♡ ~[YiZhan]Finalizado

Capitulo 6

Después de recargarse, Yibo  se sentaba normalmente en el borde de su cama , frente a la ventana, hasta que amanecía.

Xiao Zhan le había preguntado si le gustaría disponer de un futón para descansar , pero éste se  había negado, diciendo que prefería el «calor»  de la cama de Xiao Zhan y la vista desde la ventana de su apartamento.

Muchas mañanas Xiao Zhan se despertaba lentamente y se volvía para mirarle. La luz del sol acariciaba bellamente su pelo castaño. A veces, Yibo era de verdad como un muñeco, sobre todo cuando pensaba que Xiao Zhan no lo estaba mirando . Todavía era un misterio en que pensaba cuando veía la salida del sol. Era dolorosamente ajeno a ciertas cosas, pero bajo ningún concepto era tonto, daba igual lo que Hao Xuan o Song jiyang  intentasen decirle.

Encontraba entrañable y bonito el interés que Yibo sentía por las cosas más pequeñas de la vida.
Pero, era verdad, no había muchas cosas de Yibo que Xiao Zhan no encontrase adorables. Él era uno de los modelos más adorables, después de todo. Incluso sus pequeños tics faciales , que se suponía que eran los signos más evidentes de su estructura defectuosa, a ojos de Xiao Zhan eran adorables y una parte de él esperaba ver sus sonrisas solo para ver aquellos pequeños movimientos.

Podía ser que Yibo hubiese observado a Xiao Zhan la primera noche, pero era Xiao Zhan quién lo observó a él durante muchas noches después.

Sentía una extraña opresión en el pecho cuando Yibo se acurrucada  a los pies de su cama e intentaba «dormir ». Lo intentaba con todas sus fuerzas. Decía que era una de esas cosas « reales» que los seres humanos podían hacer y se sentía frustrado porque él no podía.
Aquello inconcientemente, rompió el corazón de Xiao Zhan.

~💚~❤️~

Un día, casi en trance, Xiao Zhan se perdió en la biblioteca de la universidad en busca de «La humanidad».
Entendía muy poco sobre lo que los científicos consideraban un «humano» y quería saber un poco más para poder compararlo con Yibo y todo lo que Yibo era.

La labor en sí sonaba complicada, pero fue solo después de recopilar veinte libros diferentes de psicología, sociología, antropología y literatura cuando comprendió lo irreal que era la tarea que se había encomendado a sí mismo. Descartó de inmediato todos los libros que trataban de la evolución humana, puesto que Yibo ya había sido modelo a imagen y semejanza del Homo Sapiens.

–Pienso, luego existo... – decía Descartes.

–Nuestro mundo no es real...– decía Platón–. Debemos alcanzar un nivel superior de entendimiento para exceder lo que nos enseñan qué es la realidad.

A través de Platón, Xiao Zhan comenzó su travesía por el estudio de la naturaleza humana hasta que dejó caer la frente sobre el libro. Era demasiado.

La especie humana había estado debatiendo su propia existencia y el propósito de la vida durante miles de años.
Era imposible que él lo entendiese todo en una sola noche. Por no mencionar el hecho de que los libros estaban traducidos de las traducciones de una tradición y todo le dolió el momento en que llegó incluso a pensar en coger algún libro de Rousseau.

Al final de la noche, justo antes de que cerrase la biblioteca, intentó poner las ideas en orden.
No cabía duda. Si Platón estaba en lo cierto y la «realidad» en sí misma no era real , entonces Yibo era tan real como Xiao Zhan.

Yibo pensaba por sí mismo, tenía sentimientos y sabía lo que era...¿acaso los animales sabían lo que eran? ¿Los insectos con los que a Yibo le gustaba jugar sabían que eran insectos y él no?
Pensar no era sólo una característica humana, ya que Yibo lo hacía, ¿pero sólo pensar era suficiente para hacer de él un humano?

La quinta vez que se desplomó sobre sus libros, un bibliotecario se acercó para comprobar si todavía respiraba.
Xiao Zhan, para su propia consternación, todavía lo hacía. Al final se fue sin nada aprendido.

Yibo siempre estaba ahí cuando Xiao Zhan regresaba de clase. Era tranquilo y desaparecía mientras Xiao Zhan hacia sus deberes.
Pero eso no ayudaba mucho : Xiao Zhan se distraía aun así pensando en qué podría estar haciendo Yibo en ese momento.

Yibo tenía la costumbre de recolectar insectos y llevarlos al interior del departamento,aunque sólo fuera para ver cómo reaccionaban cuando se enfrentaban a su dedo escrutador.

Un día preguntó si los animales sentían dolor.

–Algunos sí... –asintió Xiao Zhan con la cabeza –. Los animales con sistemas nerviosos complejos sienten dolor, pero sé que algunos no porque son muy primitivos.

–Soy como un insecto, ¿entonces? – preguntó Yibo levantado el dedo para mostrarle la diminuta polilla que se aferraba a la punta de su  dedo.

–No, tú no eres un insecto. Los insectos no pueden sentir muchas cosas de las que tú sientes. Tú eres diferente.– Xiao Zhan esperaba tranquilizarle con aquello, pero no estaba seguro. Yibo debía de haber estado practicando sus expresiones faciales en el espejo de nuevo, porque no dijo nada y siguió jugando con su polilla.

La experiencia de vivir con Yibo había mejorado durante el último mes.
Yibo ahora «dormía» por la noche en la cama con Xiao Zhan, y muchas veces éste se despertaba con la cabeza sobre su pecho. Le inquietaba y no era capaz de explicar qué era lo que hacía que su cuerpo se aproximase al suyo en mitad de la noche.

Esperaba que Yibo creyese que eso formaba parte de las «cosas raras que los humanos hacían» y le permitiese vivir con su propia vergüenza. Pero no lo hizo. El había sido comprado en una tienda de «novios», después de todo. Yibo estaba programado para experimentar ese proceso de abrazar a alguien.

Sin embrago, Xiao Zhan se sentía incómodo con algo más que un simple contacto amistoso y siempre era el primero en separarse del cálido abrazo de Yibo.

–No te gustó, ¿verdad ?

Xiao Zhan levantó la vista de la arrocera, con el ceño fruncido.

–¿Qué? Por supuesto que me gustas. No vivirás aquí conmigo si no me gustaras.

–No, no es... no me refiero a eso... No soy tu novio.

–Bueno, no...

–Pero yo soy... se supone que debo ser tu novio, ¿no?
Para eso me han fabricado ,para ser novio de alguien y dado que tú me has comprado...

Xiao Zhan encendió la arrocera y se alejó unos pasos, jugueteando con sus manos.

–Verás... no es que tengas algo malo, Yibo, es solo que... no te veo de esa forma.

Yibo asintió con la cabeza, pero Xiao Zhan sabía que no lo entendía.

Continuará...

💕 Espero les este gustado esta adaptación .💚❤️Gracias por su lectura.
Gracias por su apoyo. 💕