Estas son pequeñas historias de jugadores de NFL tanto Quaterback's como defensivos, receptores y runing back, etc espero les gusten. La mayoría de mis protagonistas son fotógrafas, por fa tenganme compasión.
+🔞 por advertencia.
Es un grandioso día, Ryan y los niños se despertaron muy temprano para poder salir a dar un paseo, arreglé a los niños para el gran día que nos espera, también arreglé una pequeña maleta con unas camisas de los niños y Ryan, quiero ir preparada, luego se ensucian mucho y por eso la ropa extra.
Llegamos a un parque que tiene un lago y su respectivo puente para cruzar al otro lado, Ryan cargo a Mily en sus brazos, para que ella pudiera ver el lago desde esa perspectiva, no me contuve y saque una hermosa fotografía.
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Debo admitir que los niños de mi, no sacaron nada, su cabello, su tez, incluso la sonrisa es parecida a la de Ryan.
Luego de unos minutos nos dirigimos a sentarnos al hermoso pasto, de un bonito color verde, a cuidar de los niños, los cuales jugaban alegremente, corriendo y dando vueltas.
- Es un grandioso día, no crees amor- dijo Ryan tomando mi mano.
- Lo es- le dediqué una sonrisa- Que bueno que te conocí en aquel lugar- recordé.
- No quería besar una chica de 17 años menor que yo- se río por aquello.
- No me arrepiento de haber seguido ese beso- reí nerviosa, ya son 4 años de casados y 6 de conocernos y aún así este hombre me pone nerviosa.
A mis 25 años con dos hijos y un esposo de 42 años, soy más que feliz.
- No me arrepiento de haberte besado- dejo ver su sonrisa.
- Tenía 19 y tu 36 para ese entonces- le recordé.
- Hasta siento que fui un pedófilo- se tapó la cara riendo.
- Dramático- rode los ojos y lo acompañe en su risa.
- No soy dramático, mira la diferencia de edad, eres muy joven para mi Tori- sonrió triste- Tori, que tal y un día te guste alguien más joven- pregunto apagado.
- Eso no va pasar- acaricie su mejilla- te amo Tannehill y amo a nuestros hijos, no los cambiaría por alguien las joven, jamás- pause un minuto- ya sabes lo que dicen, entre más viejos los vinos, mejor saben- le sonreí de manera pícara y él empezó a reír.
- Que cosas dices mujer- siguió riendo.
- Eres el amor de mi vida desde que tengo 14- reí.
Nuestra pequeña hija, se acercó a nosotros tomando su pancita.
- Papi- puso su manito en el hombro de su papá- me siento mal- dijo y se vomito encima de su padre, mientras yo sólo podía reír de aquella situación, la pequeña limpio su mano y boca en la camisa de su papá y dijo- ya estoy bien- sonrió y se fue a jugar nuevamente.
- No puede ser- dijo Ryan viendo el vómito de su camisa.
- Por eso yo vine preparada- le extendi una camisa azul que había traído para él.
- Fantástico- dijo quitando la otra camisa y colocándose una limpia.
- Que lindo regalo vino a darte nuestra hija- me burle.
Me sonrió con algo más parecido a una mueca- iré a enseñarle a pescar a mi hijo, con permiso- se levantó y me quedé ahi sentada riendo, mi hija se acercó corriendo a abrazarme, jugamos juntas mientras los hombres pescaban.
Pasados los minutos, nos levantamos y fuimos juntas, Ryan le explicaba a Matt y decidí tomar unas fotografías, para el recuerdo.
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Ryan y Matt sintieron al notar lo que estaba haciendo. Mily se acercó y se sentó a un lado de su hermano mayor y tomo su caña color rosa. Al final de la tarde regresamos a casa, bajamos en brazos a los niños ya que se habían dormido en el camino. Terminamos igual de cansados como nuestros pequeños.
