02

29.3K 2.3K 2.4K
                                    

━━━━━━━━━━━━━━━

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

━━━━━━━━━━━━━━━












Se obligaron asi mismos dormir para poder estar con energías al día siguiente.
La tía Petunia simplemente está vez no les gritó como de costumbre para llamarlos, los ignoró, el tío Vernon le preguntaba una vez más a Alaska si le apetecía seguir con ellos y estudiar como una niña “normal” al fin y al cabo no era una completa desgracia como Harry.

— Podemos inscribirte en una escuela para monjas — Dijo tía Petunia con una sonrisa emocionada ante la idea.

Alaska arrugo su nariz y negó rotundamente, donde sea que fuese Harry ella estaría allí con él sin importar que.

— Perderá el tiempo con sucios lunáticos que se creen superiores a nosotros — Dijo Dudley burlándose de su prima.

El muchachito sentía celos de Alaska a pesar que toda la atención se la llevará él, como de costumbre, pero sus padres eran cruel solo con Harry muy pocas veces con la gemela del mencionado parecían hasta estar encantados con ella y querían controlarla a su manera. Pero la niña los detestaba y más ahora con todas las mentiras que dijeron respecto a sus padres y a su verdadera vida.

Harry y Alaska tomaron sus cosas y salieron de dichoso hogar de los Dursley para encontrarse con Hagrid en el sitio acordado. Estaban ansiosos y con enormes sonrisas en sus bocas.

— Niños! — Hagrid los recibió con un enorme abrazo y los guió hacia la estación.

Tomaron un carrito cada uno para depositar sus cosas como lo recomendó Hagrid y de allí los guió hacia la plataforma nueve y tres cuartos para luego despedirse de los niños.

— Ahora dónde se supone que iremos? — Alaska buscaba con su mirada algún indicio de aquella dirección pero nada parecía ser útil hasta que oyó los murmullos de dos chicos.

Al voltear vio a dos chicos iguales, eran pelirrojos, cuando notaron que Alaska los veía se sonrieron entre sí y se acercaron a ella sin dudar.

— Hola! — Dijo uno de ellos —. Mi nombre es George.

— Y yo soy Fred — Dijo el otro causando que una sonrisa se apareciera en el rostro de la niña.

— Un placer mi nombre es...— Los niños la interrumpieron de inmediato.

— Lo sabemos eres Alaska...— Dijo George.

— Potter — Termino Fred.

Alaska asintió sorprendida al ver que sabían sobre ella, claro allí recordó lo que Hagrid había contado respecto a su apellido y aquellas cosas que sucedieron cuando eran tan solo unos retoños. En ese instante otro niño pelirrojo pero de la misma edad que ella se acercó y presento inmediatamente con mucho entusiasmo, a los pocos segundos se apareció Harry intentando llevarse a su hermana de allí.

𝐇𝐄𝐈𝐑𝐄𝐒𝐒 |𝐎𝐥𝐢𝐯𝐞𝐫 𝐖𝐨𝐨𝐝|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora