4. No Puedo Perdonar la Ignorancia

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—Wei Ying.

A través de la bruma del sueño, Wei Wuxian se movió ante el suave susurro contra su sien. Los labios estaban tibios mientras se movían, diciendo su nombre tan gentilmente pero llenos de tanto amor.

—Wei Ying, es hora de despertar.

—Mmmm.

Wei Wuxian refunfuñó suavemente, decidido a mantener los ojos cerrados y volver a dormir, pero también quería el afecto y la atención de su esposo. Qué conflicto.

Frunció los labios y lloriqueó suavemente, queriendo un beso. Una risa revoloteó en el aire antes de que el calor de los labios de Lan Wangji presionara suavemente los suyos. El quejido se convirtió en un suspiro feliz en lo que levantaba sus cansados brazos para rodear el delgado y pálido cuello de Lan Wangji, mientras los besos se extendían por su rostro en suaves caricias. Wei Wuxian se deleitó con la atención y tarareó felizmente, riéndose mientras los labios le hacían cosquillas en el cuello.

Finalmente abrió los ojos para mirar; los ojos dorados se encontraron con los azules, y ambos se llenaron de amor. La luz del sol naciente se reflejaba brillantemente en las impecables túnicas blancas de Lan Wangji; se sentía cegador para Wei Wuxian, quien acababa de despertar de la oscuridad del sueño. No se atrevió a mirar hacia otro lado. Aunque también era cegador, la sonrisa de Lan Wangji a primera hora de la mañana era una visión que siempre le gustaba ver.

Su esposo se veía hermoso hoy, como todos los días: cada rasgo tallado con una mano maestra, sus ángulos llamativos, el cabello de ébano fluyendo incluso con la más suave brisa, su rostro afilado pero delicado. Wei Wuxian agradeció a cualquier dios por agraciarle con el segundo hombre más bello —el primero a los ojos de Wei Wuxian— del mundo del cultivo.

—Buenos días —su voz aún era áspera por el sueño.

—Buenos días. ¿Cómo te sientes?

Wei Wuxian se estiró ligeramente, dejando que sus huesos se agrietaran y los músculos se estiraran. Sintió un dolor en el hombro y giró para ver el vendaje. Era obvio que Lan Wangji usó su energía espiritual para curarlo tanto como pudo, pero el cuerpo de Wei Wuxian tendría que terminar el resto por sí mismo. Pero aparte de eso, se sentía bien descansado... desafortunadamente.

—Solo un poco dolorido pero muy frustrado. Lan Zhan, ¿de  verdad dormí toda la noche y perdí la única oportunidad de nuestro 'día a día'?

Lan Wangji se atrevió a reírse un poco de él.

—Mn, muy necesario. Tendremos otras oportunidades.

Los labios de Wei Wuxian formaron una sonrisa mientras envolvía sus brazos alrededor de su esposo, tirando de él para besarlo lentamente de nuevo, dejando que sus labios se mantuvieran y pasándose el aliento entre ellos.

—Parece que tenemos una oportunidad ahora mismo —levantó una ceja y mordió el labio inferior de Lan Wangji burlonamente—. ¿Qué tal algo rápido, hm? —su rodilla se levantó de la comodidad de sus sábanas para presionar sugestivamente en la entrepierna de Lan Wangji, causando que se estremeciera.

—Wei Ying. Tenemos lecciones.

—Las lecciones no empiezan hasta que los maestros llegan, ¿verdad?

Lan Wangji miró hacia abajo mientras Wei Wuxian le fruncía el ceño. No estaba técnicamente equivocado.

Wei Wuxian sabía que su esposo era débil con él, mimándolo con todo, y sería un mentiroso si dijera que no lo aprovechaba de vez en cuando. Prácticamente podía ver a Lan Wangji desmoronándose a su voluntad cuando un suave golpeteo sonó en su puerta.

ೀ just as much ⊱ wangxianWhere stories live. Discover now