Tras la muerte de la señora Bennet, el señor Bennet había perdido casi todo el capital que poseía, y al descubrir que morirá pronto y que va a dejar a sus cinco hijas en la calle, cuando el señor Darcy aparece dispuesto a comprar Longbourn, el señ...
Una semana más es lo que aguantó Darcy sin trabajar, tras esa semana retomó sus tareas, aunque debía tomarlas con calma, Lizzy lo vigilaba y lo regañaba cuando pasaba demasiado tiempo encerrado escribiendo cartas o si salía fuera durante demasiadas horas. Y aunque se quejaba por no poder atender sus negocios como él quería, en el fondo disfrutaba de tener a su mujer pendiente de todo lo que hacía, y lo disfrutaba, pues le daba una excusa para que ella fuera a visitarlo durante las horas de trabajo.
La recuperación iba muy bien, y poco a poco todo parecía volver a la normalidad. Lizzy también parecía totalmente restablecida, y desempeñaba sus labores de manera excepcional. Lo único que tenía limitado eran los paseos, que no podía realizarlos a solas por si le sucedía algo, siempre tenía que ir acompañada de Georgiana y Mary.
Sin embargo, hubo un cambio significativo en la casa, y en especial en las dos jóvenes damas, Georgiana empezó a pasar mucho más tiempo ante el piano, dejando los paseos y las conversaciones que tenía con Mary, dejándola muy apenada y desconcertada. En uno de los paseos con su hermana, se le notaba especialmente decaída, y Lizzy lo notó de inmediato.
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-¿Qué ocurre Mary?- Le preguntó mientras la tomaba del brazo- ¿Te sientes mal?
-No es nada, no te preocupes.
-Algo es, sino no tendrías esa cara tan triste- Añadió, intentando sonsacarle el motivo- Si no tenías ganas de venir a pasear podías decírmelo, no me voy a molestar.
-No es eso, me encanta salir contigo.
-¿Entonces que es?- Dejó de caminar y la miró a los ojs- Cuéntamelo, por favor, quizá pueda ayudarte.
-Está bien- Suspiró con pesar- ¿Crees que he hecho algo malo estos últimos días?
-¿Algo malo? ¿Malo en que sentido? Yo creo que te has comportado como siempre.
-No sé, algo que haya podido molestar a Georgiana- Preguntó, sacando por fin el motivo de su estado de ánimo- Hace algunos días que apenas me habla- Bajó la mirada dolida- Últimamente se encierra con su piano y toca sin cesar, antes me invitaba a tocar con ella, pero ahora...
-¿Y le has preguntado si le sucede algo?
-No, me da miedo haberla ofendido de alguna manera- Se le escapó una pequeña lágrima- Pero no quiero perderla como amiga.
-Estoy segura de que todo es un malentendido, y que ella no está enfadada- Le aseguró- De todas formas, veré si puedo averiguar algo, ¿de acuerdo?
-De acuerdo- Respondió mientras levantaba levemente el rostro- Gracias Lizzy.
Durante el resto del día, Elizabeth comprobó que su hermana tenía razón, Georgiana apenas salía de la sala de música, no interactuaba con nadie, estaba siempre recluida tocando sin parar. Empezaba a pensar que no era que Mary hubiera hecho algo, sino que algo sucedía con Georgiana.
