¿Un Cupido Enamorado?

CAPÍTULO 33

Recuerdos de Jungkook pt2

Jungkook caminaba con una sonrisa y el collar arreglado en la mano hacia el negocio, estaba ansioso por darselo a Eunwoo, sabía que eso lo pondria muy felíz.

Apenas entró fue recibido por los saludos de todos los clientes, su "esposa" lo abrazó e intento besarlo pero giró la cabeza a tiempo para que eso no ocurriera, de todas manera le resultó desagradable.

-¿Dónde estabas?- cuestionó ignorando el rechazo.

-Lleve el collar para que lo arreglarán- le mostró.

-¡Oh querido!- dijo felíz queriendo agarrarlo pero Kook no la dejó.

-Si, ¿donde esta Eunwoo?- la sonrisa de Minie se forzó.

-¿Por qué lo buscas?

-Es mi hijo, eso es suficiente razón- explicó obvio pasando de ella -oh, traje algo para ti- sacó de su bolsillo una argolla simple y se la entregó.

-¿Un anillo?- preguntó emocionada pero eso se quitó al ver la calidad de este -creo.. Que es mejor material el del collar- mencionó.

-Por supuesto, ¿por qué demonios voy a invertir tanto en algo que no es real?- se burló -¡Eunwoo!- gritó y el menor llegó corriendo agitado -¿donde estabas?, tengo algo para ti.

-Estaba limpiando- explicó acercándose.

-Pero tu trabajo está en la caja- dijo confundido y el menor miró de reojo a Minie -que lo haga ella, tu no te mueves de ahí.

-Puedo estar en la caja ya que soy mayor.

-Tambien puedes limpiar y Eunwoo es muy bueno con las cuentas- ironizó -mira- saco el collar y sonrió al ver la emoción en el rostro de su hijo.

-¡Lo arreglaste!

-Por supuesto- colocó la cadena en su cuello -y ahora es tuyo, yo ya tengo uno- el menor lo abrazó con fuerza.

-Gracias pa'.

Jimin miró la seriedad en el rostro de su hermana, no le gustaba esa mirada.

Los siguientes recuerdos eran de ellos jugando con la nieve, pescando o nadando, todo era diversión y risas, incluso leían o se hacían bromas, en ninguno apareció Minie, y en cada uno se veía como Eunwoo crecía hasta estar de la estatura de Jungkook mientras jugaban a las luchas y el menor iba ganando.

-¿Que sucede papá?, ¿la edad ya está pegandote?- se burló.

-Dame un respiró, ya no soy tan joven- dijo agotado.

-Tampoco eres tan grande, sólo perezoso- rió.

-Sigo siendo tu padre, aunque no puedo exigir respeto tirado en el suelo- suspiró -bien, ganare está vez- dijo levantandose -¡ahora!- gritó y la guerra comenzó, sólo era de empujones, tirando todo a su alrededor y tropezando sin importarles o detenerse, era claro que Kook tenía más fuerza pero se dejaba vencer a veces, lo supo cuándo de un empujón lo hizo caer.