v e i n t i s é i s

3.4K 415 131
                                    

Al día siguiente, todos se dieron por enterados de lo sucedido anoche. Izuku tendría tres días de encierro mientras Katsuki debería cumplir con cuatro. Justo en el inicio oficial de nuestro segundo semestre académico. Fuera de eso, antes de iniciar clases nos comentaron el cómo influye el tener licencias en lo que sería un programa que nos permitiría ser contratados por héroes profesionales durante todo el año escolar. Una actividad externa a las clases académicas a diferencia de las prácticas...

Pero no sería hoy el día que veríamos ese tema. El día como tal fue aburrido, aunque las clases empezaron pesadas. Ahora que lo pensada, Izuku y Katsuki van a perder mucha materia.

Tras finalizar el día me quedé en la biblioteca transcribiendo y pasando al limpio todo lo que pasamos hoy a dos cuadernillos que hice manualmente. Aizawa nos dijo no podíamos comentarles de esto a los chicos, pero nunca prohibió el apoyo escrito.

Una vez finalicé, volví a los dormitorios y traté de pasar desapercibida al momento de meter bajo la puerta de mis amigos uno de los cuadernillos a cada uno, de ese modo podrían quedar al día. Incluso les puse notas extra de cómo llegue a ciertos resultados para hacerlo más simple.

La verdad, no es como que tuviese algo que hacer ahora... Fui a la sala común para encontrarme con que habían recientemente terminado el orden del día de hoy. Fui a la nevera por unos refrescos para ambos.

— Supuse estarían cansados...

Ambos me recibieron agradecidos la bebida y nos sentamos los tres en un sillón. Yo al medio para separarlos a propósito.

— Supongo nos vamos a quedar atrás... Empezaron fuerte por lo que veo... —comentó Izuku preocupado.
— Yo que ustedes no me preocupo de ello —dije de forma melodiosa mirándolo con cara de cómplice— Ya verán...

Ambos me miraron confundidos, pero me abstuve a hablar. Quería ellos lo vieran por su cuenta. Los días que siguieron hice lo mismo. No fue hasta que Izuku retomó clases con nosotros que me lo comentó.

— Muchas gracias por lo que hiciste —me dijo susurrando en mi oreja.
— Mientras no les digan a nadie —respondí con un guiño.

Ese día nos presentaron a tres alumnos de último año, considerados los mejores de la escuela. Sin comentarios, era confuso. Sus personalidades eran tan diferentes que me perdía y no lograba entender el punto de que estuviesen aquí. La chica preguntaba cosas incómodas, un chico solo nos ignoraba debido a su serio pánico social y el otro tenía ojos de aceituna...

Este último nos propuso una demostración que Aizawa permitió. Joder, nos hizo polvo. Pensé que iba a morir... Agradecía que Katsuki no estuviese aquí, no necesita más competencia por ahora, está lidiando con suficiente...

Una vez regresamos a los dormitorios y lo vi, fui a saludarlo antes de ir a mi habitación a cambiarme y también a recoger algo, estaba decidida. Una vez regresé al primer piso, me topé con Ochaco, a quién saludé de lejos cuando me vio.

— Daiya-Chan, ¿qué sucede? —me preguntó intrigada.
— ¿Has visto a Katsuki? —pregunté en un susurro.
— Hm... —expresó mirando a su alrededor— Ah, ¡allí está!

La vi apuntar lejos de nosotras y efectivamente, estaba cerrando algunas bolsas de basura. Lo vi incorporarse para pasar su antebrazo por la frente al parecer para limpiarse el sudor. Debe estar agotado...

— Oh, vamos... —dijo Ochaco a mi lado haciéndome volver a la realidad— Solo dile que lo encuentras lindo —dijo entusiasta a lo que me tensé de nervios— ¿Qué es lo peor que podría suceder? —dijo relajaba dejándome en unos momentos de silencio antes de poder contestar.
— Podría escucharme, podría matarme... —respondí automáticamente asustaba, a lo que Ochaco se puso a reír a carcajadas de mi.
— Lo lamento Daiya, es solo que tu rostro fue tan... —no pudo ni terminar y siguió riendo haciéndome sentir más avergonzada.

"Diamante Inestable" Bakugo, KatsukiWhere stories live. Discover now