|CAPÍTULO DIEZ|

9K 1.3K 2.1K
                                    

Ese día Jisung no tenía ganas de nada, quiera irse a casa; darse por vencido de una vez por todas. Aunque era orgulloso esta vez era lo menos que sentía por su trabajo.

Nuevamente estaba en un jodida cama de hospital, tenia un catéter en su brazo derecho que conectaba a algunos sueros.

— ¿Te sientes Mejor? — ChangBin asomó su cabeza en medio de la gran puerta de cristal emborronado.

Jisung le sonrió de forma amistosa, el pensamiento de lo que llego a ver cal comió su mente en sólo segundos borrando esa sonrisa y planteando a un Jisung más serio.

— Estoy mejor, gracias — Changbin se acerco a paso lento a Jisung, pudo notar como otro chico se colaba entre su sombra — Y hola felix — el nombrado salio de su escondite con un puchero en sus labios.

— Binnie malo, dijiste que Jisunggie no me iba a ver — felix daba pequeños golpecitos en el pecho del mayor — ¡No tendrás eso que te gusta por un mes! — chilló tapando su boca rápidamente.

El calor se apoderó de las mejillas de Changbin, Jisung sabia a que se refería, por eso le dejó una mirada ladina al más bajo.

— Shhh — chisto un avergonzado Changbin — ¿Cuando piensas levantarte?

— No, no puede — otra persona contesto por el, Minho se acerco al rubio con una sonrisa— Nos dejarían solos por favor.

Los dos contrarios sintieron saliendo de la habitación, Jisung mantenía una cara de indiferencia al máximo. Trataba de mantenerse a raya sin tener que pensar en ese estúpido sueño húmedo que reaparecía en su cabeza.

— ¿Que quiere Lee?— Jisung ya están harto del mayor, si quería golpearlo y no le importaba solo quería que lo dejara en paz.

El ojinegro se acerco de forma peligrosa al rubio, quien se rodó un poco para atrás.

— Quiero empezar de nuevo — en esos momentos lee Minho sostenía fuertemente la mano de Jisung, quien no muy convencido lo único que hizo fue asentir — Se que no nos llevamos bien — Eso si era verdad.

Desde el inicio, o bueno, desde la llegada de Jisung a ese psiquiátrico solo han sido problemas con su Paciente todo el tiempo, o al menos eso creía por el comportamiento del contrario.

— Nosotros no podemos estar bien Minho, tu estas...— Jisung se calló, tenia esa palabra pegado en su cerebro.

— Enfermo, lo se — su tono era triste — pero de ello no te preocupes, puedo seguirlo si gustas.

— ¿Tienes uno?— el de mejillas regordetas lo observó algo sorprendido.

— Deberías saberlo — le sonrió, Jisung sintió su corazón dar un gran salto de alegría.

Minho cada vez se acercaba más y más a su rostro, Jisung cerró los ojos por inercia, sus labios estaban a solo un toque de concretar.

Y así paso.

Jisung dio un pequeño brinco por el tacto ajeno, intento zafarse del beso pero fue algo inútil, lee Minho era mas fuerte que el.

Se separaron por el sonido de la puerta, Jisung no sabia en donde meter su cabeza estaba totalmente sonrojado. En cuanto a Minho el solo mantenía una sonrisa boba en su rostro.

— Jisung ya puedo darte de alta — la enfermera sonrió sin darse cuenta de la presciencia del ojinegro — Señor lee.

— No soy viejo por el amor a dios — se levantó dispuesto a irse— nos vemos luego sunggie — beso su frente de forma tranquila.

𝑇𝑜𝑜 𝑀𝑎𝑛𝑦 𝐹𝑎𝑐𝑒 Where stories live. Discover now