Capítulo 3

193 7 0
                                    


--¿Solus-sama?

Como si la misteriosa figura hubiera escuchado los pensamientos de Bercouli, giró su cabeza hacia él. Poco a poco, "Solus" descendió del cielo. Finalmente, sus botas azules tocaron el suelo, pero no articuló palabra.

--¿Eres Solus-sama?-- Rompió Bercouli el silencio.

--No, no soy ella. Me llamó Sinon.

--¿Entonces eres como esa chica?

--¿De quien estás hablando?-- Preguntó Sinon confusa.

--Recuerdo que se llamaba Asuna. La vi aye-

Sinon le interrumpió. --¿La conoces?

--Hablemos en un lugar más privado.-- Bercouli comenzó a andar hacia el árbol hueco , solo que Sinon no le siguió.

--Por aquí, por favor.-- Insistió.

--Hay alguien más que debería unirse.

Dicho esto, una chica con ropajes verdes salió de unos arbustos. Llevaba el pelo recogido en una coleta y era rubia, sus ojos eran como dos esmeraldas.

--¿Donde te habías metido?-- Preguntó Sinon preocupada.

--No lo sé. Aparecí en otro sitio no muy lejos de aquí.

--Supongo que tu no eres Terraria-sama ¿verdad?-- murmuró Bercouli después de un suspiro.

--No, me llamó Leafa...Por cierto, ¿quien eres?

--Como he dicho antes, seguidme, por favor.

Leafa no entendió, pero al ver que su amiga lo seguía, ella hizo lo mismo. Los tres se metieron en el árbol hueco y cuando su visita se enfocó bien para poder ver en la oscuridad, Leafa presenció una sombra gigante.

--Waaaaa!!--Gritó mientras se ponía detrás de Sinon-- ¿que es eso?-- Preguntó.

--No te preocupes, --intervino Bercouli-- no te hará daño. Es mi dragón.--Se sentó en el suelo mientras terminaba de decir-- Lo siento, pero no puedo ofrecerles más.

--No se preocupe. Ahora cuéntanos sobre Asuna.

--Espera, ¡¿QUE?! ¿Has visto a Asuna-san?, ¿Como se encuentra?-- Gritó Leafa.

--Pues la verdad es que cuando la vi, no estaba en muy buenas condiciones.

--¿A que se refiere con "no muy buenas condiciones"?-- Preguntó Sinon.

--Cuando la vi por primera vez, fue porque cayó de un agujero que estaba en el techo. Su cabeza derramada sangre y se arrastraba por el suelo, ya que tenía las piernas congeladas. Unos segundos después perdió la conciencia y no pude hacer nada por ella.-- Leafa se llevó las manos a la boca mientras unas lágrimas se formaban en las comisuras de sus ojos. Sinon tenía los mismos como platos mientras apretaba sus manos en forma de puño, clavandose las uñas.

--¿Y solo viste eso? ¿No viste nada más?-- Preguntó la peliazul preocupada.

--Después de eso tuve que escapar ya que me vieron. Conseguí escapar con mi dragón y sin saber a donde iba, me hospedé aquí.

--¿Y donde ocurrió eso?-- Murmuró Leafa mientras se limpiaba las lágrimas que comenzaban a salir.

Bercouli apuntó hacia la Catedral Central y respondió. --Fue allí, en el piso 99.

--Entonces tenemos que ir.-- Se levantó Sinon del suelo.

--Yo no creo poder. --Murmuró Bercouli-- La que le hizo eso a esa pobre chica conoce mis puntos débiles. No tengo posibilidad de ganar contra ella. Pero sí os podría prestar mi dragón para que os lleve.

No me olvidesWhere stories live. Discover now