Las miradas iban y venían, nadie se atrevía a hablar y yo me estaba conteniendo a no hacer un berrinche o a decir algo que el idiota de Iván pudiera tomar en mí contra.
-Así te quería encontrar, metida en la boca del lobo.-Corrí la mirada puesta en Yesenia y me adelanté unos pasos estirando mi brazo para tomar mi teléfono, sin esperar que Iván daría esos mismos pasos hacia atrás impidiéndome tomar el aparato.-¡Dame mi maldito celular, Iván!
-¿A cambio de qué?
Solté un jadeo incrédula-¿A cambio de qué? ¡Es mío!
-Cayó en mí propiedad.
-¿Y a mí qué, Iván? ¡Dame eso!-Volví a aventarme sobre él pero fue la misma situación anterior provocando las risas de quienes nos veían.
-Esto.-Sacudió el iPhone con funda rosa y pequeños diamantes incrustados en su funda-Cayó en mí casa, mí laboratorio, y si vas a armar otro de tus pinches berrinches mejor vete.
-¿Por qué no me dijiste que este idiota tenía sus laboratorios pegado al edificio donde rentaría, Yesenia? ¡Me fui de la hacienda porque no lo soportaba más y ahora está aq...!
Dejé de extender mis brazos al aire y recuperé mi actitud neutra cuando me entró una llamada.
-Mira nada más, el compa Gera.-Iván soltó una carcajada y me enseñó la pantalla.-Que pena que tu noviecito el ranchero no pueda comunicarse contigo.-Fingió un tono de pena claramente falsa, y cortó la llamada.
-¡Iván que me des el puto teléfono!
-No mi ciela y por favor vete saliendo que nosotros tenemos que trabajar.-Arremangó su camisa negra hasta sus codos y se cruzó de brazos.-Salvo que quieras entrarle.-Mojó sus labios viéndome desde su altura, generando más diferencia entre ambos.
-Nunca voy a trabajar en esto, Archivaldo. Jamás.
-Entonces será una pena que te corra pero.-Hizo una seña con su mano incitándome a salir. Fingiendo haber sido derrotada asentí.-Te acompaño hasta la puerta, viste que eres media torpe tal vez y te pierdes.
-Tu y yo vamos a hablar.-Le murmuré a Yesenia antes de seguir por el oscuro y desolado pasillo, a Archivaldo.
En un determinado momento, cuando reuní la valentía y fuerza suficiente, barrí los pies de Iván con los míos haciendo que trastabillara mientras aprovechaba a sacarle de su bolsillo el celular.
-Cuidado no te vayas a caer Iván, tu que eres medio torpe.-Dije burlona una vez que pasé por su lado, apurada antes que lograra recomponerse.
-¿Ya te vas cuñada?-Asentí sin prestarle atención al hombre en la puerta, me quité lo que anteriormente me había dado y salí de aquella casa más furiosa de lo que había entrado.
°°°
YOU ARE READING
A Veces | Iván Guzmán| TERMINADA
Fanfiction-A veces te amo, a veces te odio. Pero cuando te odio, es porque te amo.-Sentenció el hombre dejándose llevar por todos aquellos sentimientos que se habían contenido por tanto tiempo y terminó con los pocos centímetros que había entre ellos sellando...