69

5.3K 451 88
                                    

Tras un extenso viaje en carro, otro en jet privado y otro más en carro, al parecer estábamos llegando a donde Iván quería llevarme

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Tras un extenso viaje en carro, otro en jet privado y otro más en carro, al parecer estábamos llegando a donde Iván quería llevarme.

—Oye ¿Sí sabes que tengo rastreador no? Así que si quieres traerme a un lugar alejado para matarme y luego botarme te digo que no te resultará.—Me removí incómoda en el asiento de la camioneta y volví a mirar al frente. 

—No seas ridícula, que si te mato será a besos.

—¿Cómo?

—Nada.—Respondió él sonriéndome de una manera inocente cuando frenó la troca al frente de un enorme paredón, o bueno, en lo que parecía ser la entrada de hierro entre los paredones que bordeaban algo sumamente ¿Confidencial? Sino ¿para qué tanta seguridad?—¿Se te hace conocido este lugar?—Preguntó cuando comenzábamos a ingresar a la propiedad, donde desde la lejanía se podía apreciar una enorme y preciosa mansión sumamente lujosa y al parecer nueva, o muy bien mantenida.

—¿Por qué debería?—Él negó y suspiró sin dejar de avanzar lentamente hacia el frente de la mansión, dando una vuelta en semicírculo bordeando la fuente acuática circular con una estatua de una diosa griega en el medio. Atenea. 

Embobada con la fachada de la propiedad, no supe en qué momento Iván se había bajado de la camioneta y la había rodeado para abrirme él la puerta, empujando a un lado al empleado que lo había intentado hacer.

—¡Al fin Iván! Creí que se los había tragado el triángulo de las Bermudas con tanto que tardaron. ¿Por qué quisiste venir en jet? ¿Tan egocéntrica eres mi ciela?—Iván bufó y se soltó dle agarre que Alfredo mantenía sobre él—¡Cuñada tanto tiempo sin vernos! Hasta creí que no podría seguir teniendo rating contigo en mis tiktoks.

Arrugué mi nariz y protesté.—¿Por qué me dices cuñada? E Iván, ya dime qué es esta mansión.

—¿Te gusta al menos?-Murmuró viéndome de manera directa a los ojos.-Tiene tres piscinas de distintas formas y tamaño, una al lado de la otra, miles de hectáreas con animales donde Nina, Blako y Chente jueguen y no coman a los bisontes americanos, donde Kala, tu serpiente pueda tener su hábitat y hasta hay un estanque con cocodrilos al finalizar la propiedad.

—Suena como la descripción de la casa de mis sueños—Murmuré entre dientes totalmente atónita.—¿Y cómo está de que mis animales est...?-Llevé mis manos a mi cabeza y una sombra negra nubló mis ojos, aferré mis dedos al brazo de Iván dejando de subir las escaleras de la entrada.

—Amor ¿Estás bien?

—¿Y eso?

—Es mi regalo para ti. Feliz cumpleaños.—Murmuró a mi espalda posando su mano en la curva de mi cintura y trasero. Dos bolsas blancas con el logo de la famosa marca que Iván odiaba eran acompañadas por dos ramos medianos de rosas rosa pastel, una caja transparente rellena de dólares con un lazo rojo y un bulto tapado con una tela negra.—¿Te gusta?

A Veces | Iván Guzmán| TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora