6 Grandes Héroes: Fukushū

Enfrentamiento

Notas de la Autora:dd

Hola! Si lo sé, he faltado a mi palabra, no he subido cap en dos semanas, de verdad lo siento mucho, pero tuve varios imprevistos y no pude terminar de escribir el cap, sino hasta hoy que tuve tiempo.

Espero no haberlos decepcionado y que disfruten este cap tanto como yo disfrute escribiéndolo.

Apoyen esta historia con un review, sé que hay muchos que leen esta historia, vamos no sean tímidos!

Disclaimers:

Los personajes de los Grandes Héroes no me perteneces, son propiedad de Disney/Marvel. Lo único de mi propiedad es la historia, la cual disfruto mucho escribiéndola y compartiéndola con ustedes.

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Capítulo 8: Enfrentamiento

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En la mansión de los Frederickson, misma que ahora yacía destruida, Wasabi abría los ojos con pesadez, le dolía horrible el cuerpo, aunque no se comparaba con el tremendo dolor de cabeza que tenia. Se sentó sobándose las sienes, enfocando mejor su vista, soltando después un gritico al ver todo destruido y que estaba tirado en el piso de la sala. Lo peor era que estaba en calzoncillos, volvió a gritar como niña, totalmente horrorizado.

A unos metros de él, estaba Fred, aun dormido babeándose, acostado también en el piso y en ropa interior, a pesar de los gritos de su compañero, este no se despertó.

— Pe-pero... ¿Qué pasó aquí? —Se cuestionó confundido, alterado por no poder recordar nada.

Un carraspeo lo hizo voltearse, encontrándose con dos siluetas femeninas que él conocía muy bien.

— ¡Chicas! Me alegro de verlas —gimoteó el pelinegro, lanzándose a sus pies— díganme que no me pasó nada malo por favor.

— No te pasó nada malo —lo calmó con voz tranquila— aun... —soltó cambiando su semblante a uno molesto. Ahí fue cuando Wasabi cayó en cuenta que Honey tenía el ceño fruncido y lo miraba molesta.

— No puedo creer que hayas actuado así Wasabi —confesó Honey con molestia.

— De Fred me lo esperaba pero de ¿Ti? No puedo creerlo —siguió Gogo de brazos cruzados.

— ¡No entiendo nada! Se los juro, no me acuerdo de nada —lloriqueó abrazándose a las piernas de sus amigas.

— ¡Tú y Fred enmendaran este desastre! —Dictaminó Honey señalando a ambos acusadoramente.

La pelinegra solo se apartó bruscamente de Wasabi, dirigiéndose donde el rubio para despertarlo.

Tomó una botella que estaba en el destrozado sofá, esta milagrosamente estaba intacta, llena hasta la mitad. La destapó tranquilamente, para después echar su contenido en la cara de Fred.

— ¡Lo juro capitán Fantasia, soy inocente! —Gritó este sentándose de golpe, Gogo le dio un fuerte zape en la cabeza.

— ¡Déjate de tonterías!

— ¡Frederick, estoy sumamente molesta contigo! ¡Nos mentiste! ¡No les dijiste de ninguna fiesta a tus padres! ¡Y la mansión está destruida!

— Y-yo yo...

Gogo lo agarró de la quijada, obligándolo a mirarla.

— Escucha bien —empezó a decir la pelinegra— van a limpiar cada rincón de esta casa y no sé cómo demonios le van a hacer con las paredes. La quiero completamente limpia y reparada. No quiero excusas ¿Entendieron? —Preguntó mirando a ambos, sin soltar el rostro del rubio, que empezaba a quejarse por la fuerza del agarre, estos asintieron asustados— Muy bien ¡Mas les vale arreglar todo esto, si no quieren que los muela a golpes a los dos! —Amenazó— como Hiro, Honey y yo limpiamos mucho esta madrugada, no les ayudaremos —sentenció Gogo, soltando a Fred sin delicadeza.