Capitulo Único

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La secundaria Cloud Resses de GusuLan tenía una tradición que iba totalmente en contra de todo lo que ellos creían: simplicidad, discreción y control. Si bien, más que una tradición era algo que los de la generación pasada habían iniciado, los demás estudiantes mantuvieron esa práctica viva, invitando a todas las clases y cursos a hacer lo mismo. Cómo no iba en contra de ninguna las 4500 reglas que enorgullecían a GusuLan, Lan Xichen, el director, y Lan Wangji, el subdirector, estaban de acuerdo en permitir aquella pequeña "celebración".

La práctica del Festival De Cartas (como fue llamado por uno de los consejeros escolares, Wei Wuxian) consistía en decorar levemente el salón con papeles y carteles rosas o melocotones, y dejar una pequeña canasta personalizada en sus bancos. Así, durante los recesos, se haría una fila dónde todos entrarían, dejarían la carta a su destinatario sin su nombre, y luego saldrían. Nadie salía herido o rechazado, y todos logran quitar ese peso de amor de encima ¿Verdad?.


No para todos, aunque más específicamente, no para aquel joven de ropajes amarillos.

Cuando Jin Ling se cuestionaba al respecto de porque se había enamorado de esa persona, de aquel que lo había metido en problemas millones de veces, de la peor que podia elegir realmente, Jin Ling no sabía, el realmente no sabía ¿Desde cuándo el joven Lan de cabellos cortos lo hacía sentir así?Alborotado, nervioso y un poco acalorado cada vez que lo tenía cerca.

Mientras miraba al pequeño Lan ser tan ruidoso como siempre, ayudando a Sizhui con los preparativos de la entrega de cartas, apretaba la que el mismo llevaba en la mano con un destinatario claro. El único problema era, que el mismo era su único enemigo para dejar fluir aquellos sentimientos claros después de muchos problemas internos.

Aunque en realidad Jin Ling si sabía el porque Lan Jingyi aún sin nombre de cortesía se había robado su corazón, no quería pensar al respecto, porque si se ponía a pensar en ello se pondría a pensar en todas esas cosas que el adora de Jingyi, en aquellas cosas que cuando lo conoció le molestaron increíblemente, y ahora llamaban su atención de forma romántica, en esas ocasiones dónde Jingyi lo defendió, lo cautivó y (finalmente) lo enamoró.


Como aquella vez en la que Jingyi lo defendió de una falsa acusación con su tío, dejando a ambos en castigo (copiando las reglas alrededor de unas tres horas luego se clases) por falta de pruebas, y no se enojó con Jin Ling cuando éste le reclamo ser un idiota cuando lo que realmente quería decir era gracias.


Pues nadie antes se había sacrificado así por él.


O esa otra vez dónde Jin Ling había tenido el coraje suficiente de pedirle al resto de su salón si quería unirse a él, para ayudar a un pequeño hogar de perros al final de la calle que estaba por ser cerrado por falta de ayudantes. Y cómo no, el único en ofrecerse fue Jingyi a pesar de los comentarios de sus compañeros, ya que Sizhui no se encontraba presente. El Lan menos Lan no solo lo realmente lo acompañó a pesar de los comentarios pasivo-agresivos de la Joven Ama y de los cuchicheos de sus compañeros que fueron callados con una mirada severa del mismo Lan, sino que ayudó de corazón a esos pequeños cachorros evitando la clausura del lugar, y le dijo a Jin Ling algo que todavía hacía rugir su pobre e inmaduro corazón.

"Tu sonrisa es muy bonita, deberías sonreír más Joven Ama, ¿Tal vez si llevo cachorros al colegio sonreirias así?" Al compás de una sonrisa graciosa y burlona, pero sobre todo, honesta.

Despejó su mente tan rápido como pudo, quitando sus ojos de aquellos alumnos de blanco aún haciendo los preparativos con el permiso del profesor de arte, el señor Nie.

No quería seguir divagando en Jingyi, ya lo hacía bastante durante su tiempo libre sin siquiera estar conciente.

Aún así esa pregunta rondaba en su mente.

"¿Cuando había cambiado tanto su relación?"

Zhizen fue el primero en hacer esa pregunta. Jin Ling, totalmente desprevenido, también pensó al respecto.

Festival de Cartas [LingYi] Where stories live. Discover now