She's a Boy [Vhope] libro 1

28. Una persona de apariencia

Hoseok se encuentra en una situación difícil porque a decir verdad, no sabe qué va a decir, no estaba listo para decir que él y Taehyung estaban en una relación pero tampoco se había referido a Taehyung como un amigo en mucho tiempo.

Entonces, hace lo que mejor le sale: Ignorarla

—Te pido que por favor, salgas de aquí—la mira a los ojos—Esto que haces es de muy mal gusto. Esta es la última vez que lo tratas mal, no me importa que seas mi madre, llamaré a seguridad y que te echen a la calle como un perro.

Los labios de Taehyung llegan al suelo mientras ve a Hoseok enojado, su rostro completamente rojo y fruncido, con las venas sobresaltando en su frente y cuello
Sabía que no era un buen momento, pero estaba tan prendido.

Su madre sale sin decir nada y él se sienta a su lado en sus suspiro, aún enojado y respirando con dificultad. Taehyung se acerca un poco a él, atrayéndolo hacia su pecho y acariciando su cabeza.

—¿Estás bien?—lo mira a los ojos y Taehyung asiente—¿Ves todo esto? Mi familia es una completa mierda, ¿puedes imaginar toda la mierda que dirán cuando sepan que tenemos algo?—frunce su ceño—¡Maldita sea!

—Ya...—lo hace mirarlo a los ojos—Los comentarios de tu madre no van a hacer que me aleje de ti, de hecho...nada lo haría—sonríe—Me defendiste bien, Hoseok, es todo lo que importa.

—Y casi yo...casi se da cuenta—suspira—¿Cómo eres tan valiente, Tae?

—Supongo que es porque no espero nada de ellos—sonríe y baja el rostro—Ya pasó, ¿sí?—le deja un beso suave en los labios—Sólo...almorcemos en paz.

—¿Pero estás bien?—hace un puchero mientras lo abraza más fuerte.

—Mi J-hope ha venido a salvarme—sonríe

—¿J-Hope?—sonríe—Tae, eso suena muy bonito—mira sus labios—Dame un beso.

—Todos los que quieras—sonríe antes de empezar a devorar sus labios sin importara nada, ignorando por completo lo que había acabado de pasar.

Las palabras de Taehyung sonaban en su cabeza una y otra vez, cada vez que lo veía a los ojos sólo podía pensar en él mal rato que le había hecho pasar su madre y en lo expuesto que había quedado con soltar esas palabras. Aunque ver esos ojos de Taehyung había valido la pena, sin embrago, sabía que él no era completamente feliz estando a su lado.

Era una lástima, porque se sentía tan feliz con su relación que no hallaba que otra cosa hacer para que Taehyung se sintiera de la misma forma. Aunque sabía que estaría de esa forma hasta que le dijera a sus padres lo suyo.

La semana pasa muy rápido, en el círculo vicioso de estar solo en su casa porque Taehyung necesitaba trabajar y en hacer sus estupidas cuentas de noviembre, que parecían ponerse cada vez peores.

—Todo está bien, mis fotos sí han sido un éxito y el diseño del álbum también lo es—Taehyung se escucha emocionado—Realmente, estoy muy feliz por los chicos y por todo el esfuerzo.

—Estoy tan orgulloso de ti, Tae—sonríe mientras menea el vino en su copa—Ha valido todo que me hayas dejado dormir solo toda la semana.

—¿Me extrañas mucho?—sonríe—¿Qué es lo que extrañas,Daddy?

—Ufff...eso—ríe—Más que todo, tenerte al final del día y saber que todo está bien. El lunes fue un poco intenso—suspira—Aveces creo que deberíamos hablarlo.

—Está bien, Hoseok, yo estoy bien y lo voy a estar—susurra—¿quieres hacer algo por la tarde?

—De hecho—sonríe—¿Estás libre más tarde?