DÍA 3: CONOCIENDO A LA FAMILIA.

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. - ¿Estás seguro de esto? – Pregunto Auron al hombre que se encontraba frente a él.

. – Han pasado ya un par de meses, creo que es momento que lo sepan. - Respondió Rubius dejando en claro su punto de vista. – Tranquilo calvo que todo va a salir bien. –Aseguro el menor mientras se acercaba a tomarlo en brazos para tallar su espalda en un abrazo reconfortante.

. – Eso dices ahora chaval, que no quiero que nos matemos entre nosotros. – Murmuro aun con la preocupación latente en su piel el de ojos color avellana. - ¿No podemos estar todos juntos? –

. – Seria muy sospechoso. – Respondió el cura.

. – Verme solo con Nieves y tú con toda mi familia no lo hace menos sospechoso, gilipollas. - Dejo en claro Auron con la situación que se iba a presentar actualmente entre ambos.

. – Pero tú eres el psicólogo del pueblo, también el doctor, psicólogo, juez, veterinario, cazador y ahora mismo eres el candidato a la alcaldía así que no sería raro verte en el pueblo paseando con algunos de tus pacientes o simplemente una ciudadana que tratas de convencer para que vote por ti. – Rubius solo estaba tratando de darle una situación de donde se pudiera aferrar para estar más tranquilo.

. – Te falto una de mis profesiones. – Fue la única observación que le quería hacer al cura.

. - ¿Cuál fue? – Pregunto el oso un poco desconcertado, según él se sabía absolutamente todos los trabajos de Auron que este ejercía al menos que haya tomado uno nuevo y apenas estuviera por decirle.

. – Es el más importante de todos. – Aclaro antes de hacer una pequeña pausa. – Ser el novio del cura del pueblo. –

. – Que afortunado debe ser ese hombre. – Menciono Rubius mientras se inclinaba para poder acercar su rostro cada vez más al ajeno.

. –Yo pienso lo mismo. – Contesto siguiéndole el juego mientras besaba al fin a Rubius.

¿Cuál era la situación de estos dos?, déjame ponerte en contexto. Auron y Rubius llevaban ya en total cinco meses juntos el único problema es que su relación era un secreto para cualquiera en Karmaland, ante los ojos de la gente ese par había recuperado la cercanía que tenían antes sin imaginar realmente lo que pasaba tras las puertas cerradas. Actualmente se acercaba su aniversario lo que significaban que pronto tendrían medio año de estar juntos y no podían ocultarlo por más tiempo.

Ambos querían pasearse por el pueblo tomados de la mano, abrazados hacer lo que hacían todo el resto de parejas que habitaban Karmaland, querían poder salir sin tener que aparentar ser solo amigos, pero el acuerdo de ambos era claro no querían hacerlo público desde el inicio porque no estaban tan seguro de como funcionaria su relación para sorpresa de ambos esta iba de maravilla.

Solían pelear a veces, pero por cosas típicas así que hasta el momento no había una ruptura en la pareja, querían que los primeros en enterarse fueran sus familias pues el esconder el secreto de ellos era mucho más doloroso y difícil al compartir casa.

Rubius sabía que todo saldría bien con su niña y su señor, Nieves era alguien alegre y amigable así que no se preocupaba que no congeniaran por otro lado Auron estaba más preocupado su familia era numerosa y complicada, Rubius al contrario de él tendría que pasar tiempo con ellos en su casa debido a que Luziana y Elva no podían salir, si era cierto que ambas podían salir y sobrevivir fuera del agua pero no querían arriesgarlas con el resto de aldeanos o algún otro héroe, a eso se le sumaba Aurora no deseaba que alguien le robara a su preciada hada pero dejando eso de lado su familia era sobreprotectora con él, después de lo que paso con Luzu y su maldición el cuidado hacia él aumento en especial por parte de su hermana mayor, Mónica si ella se enteraba de todas las cosas que había hecho con Rubius no quería saber o imaginar que le podría hacer a su pobre osito.

RUBIUSPLAY WEEKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora