Luego de la muerte de Dean las cosas se complican un poco para los cazadores. Sam cegado por la ira y sed de venganza buscara por todos los medios matar a Lilith, provocando que este se aleje de las personas que lo aman, Grace por su parte al ver qu...
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En un oscuro y vacío callejón un hombre corría con su mano en el estomago para detener la sangre que salía de su estomago, cada vez que corría se le complicaba mucho caminar pero si se detenía era claro que seria el final. Miro con horror el final del camino, había entrado a un callejón sin salida y no podía devolverse ya era demasiado tarde, se giro hacia sus talones para enfrentar a su destino.
-¡¿Qué me hiciste?!.- Le grito a la silueta que caminaba con un sombrero sobre su cabeza.- ¡¿Que me hiciste, Maldita perra?!.- Volvió a repetir a la joven que se acercaba amenazante.- He oído de ti, Ya no eres conocida como la cazadora.-
-Me agrada que sepan de mi existencia.- Levanto la cabeza para dejar al descubierto los mieles ojos de Grace mirando aquel hombre bajo la luz de la luna.- Pero tus palabras no me importan, solo estas asustado y eso es patético.-
-¿Donde están tus amiguitos?.- El hombre poco a poco iba cayendo al piso.- A ya lo recuerdo, uno esta retorciéndose en el infierno.- Grace saco una espada que la acompañaba, puso el filo de esta justo debajo de la barbilla.- Quieres matarme, hazlo Total no somos tan diferentes.-
-Yo no fui quien asesino a una joven inocente.- Grace enterró un poco la espada para que su cuello comenzara a sangrar.- ¿Qué ocurre? ¿Tus poderes te están fallando? ¿O acaso solo eres un impotente vampiro?.-
-Deja de actuar como humana.- Grace apretó la empuñadura de la espada con mas fuerza.- Tu amigo el cazador luego vendrá por ti, por que eres un monstruo igual que nos...- Grace en un simple movimiento le corto la cabeza del vampiro.-
-Ya me estaba aburriendo tu discurso.- Lo soltó aun sabiendo que ya no la escuchaba, soltó un suspiro mientras veía el charco de sangre bajo sus botines, se paso la manga de su chaqueta por el rostro era obvio que la sangre también había caído sobre él. Camino por el callejón de vuelta mientras limpiaba su nueva arma, era una espada del mismo tamaño de un machete aunque su hoja tenia un corte peculiar y grabados unos signos algo extraños, algunos los conocía eran los mismo que tenia en sus manoplas, pero el resto jamás los había visto. Era mas que especial esa espada, tan solo la había tenido un par de días en sus manos y descubrió que un vampiro no se recuperaba tan rápido luego de un corte.-
