5.ʟᴀ ʙʀúᴊᴜʟᴀ ᴅᴇ ʟᴀ Sᴜᴇʀᴛᴇ. ii

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ʟᴀ ʙʀúᴊᴜʟᴀ ᴅᴇ ʟᴀ sᴜᴇʀᴛᴇ

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ʟᴀ ʙʀúᴊᴜʟᴀ ᴅᴇ ʟᴀ sᴜᴇʀᴛᴇ

El siguiente destino fue el faro de Redfield, el lugar favorito del padre de John B.
Bajaron de la furgoneta.
-de acuerdo, tú vas a hacer guardia por si nos pilla alguien.- dijo John B a JJ.
-espera, ¿por que yo?
-Por que tú no vienes.- dijo Pope.- JJ hay variables dependientes e independientes, y tú eres una independiente, no sabemos lo que harás.-
-Más bien, por tu tendencia a sacar la pistola en cualquier situación.- dijo Kenzie apoyando a a Pope, JJ empezó a discutir con ambos.
-¡Solo escuchad!- dijo John B callando a los tres.- Pope, Kenzie os quedaréis con JJ, ¿vale?, si nos separamos nos vemos en su casa.- Kenzie no se quejó ya que no le apetecía subir, ni tener más acción en el día. Kiara y John B saltaron la valla, mientras Pope redactaba su memoria para la beca, JJ jugaba con una roca.
Mackenzie se sentó sobre el césped. Cerró los ojos durante unos minutos, disfrutando del silencio, al abrirlos tenía la mirada de JJ sobre ella.
-¿Qué?- preguntó ante la persistente mirada, él se encogió de hombros y se sentó en frente suya.
-¿Estás bien?- la rubia se sorprendió, no es que pensase que JJ no tuviera sentimientos, bueno, en realidad sí que lo pensaba, pero se esperaba cualquier pregunta menos esa.- ya sabes, recordando lo de tu familia.
-estoy bien, puedo hablar del tema con normalidad, sin tabúes. Solo, no quiero darle falsas esperanzas a John B, ¿sabes?- por una vez en su vida, mantenía una conversación sin insultos con JJ, y no la desagradaba para nada.
-A veces está bien hablarlo, dejarlo salir, ya me entiendes.-su mirada se posó en el césped. Jugaba con la piedra entre sus manos.
-Todavía no te he dado las gracias, por lo del baño.
-tranquila solo pasaba por si encontraba algo interesante, como a una chica en ropa interior o algo parecido.- dijo con un tono divertido haciendo sonreír a Kenzie.- Creo que es lo que habría hecho cualquiera.- el sonido de la alarma de policía se hizo presente. Se levantaron y corrieron hacia la furgo, JJ se puso al volante, Pope como copiloto y Mackenzie atrás.
-¿Que mierda habrán hecho?- preguntó Pope alterado. Como era previsto acabaron en casa de JJ. En la cual Kenzie conocía por fuera pero nunca había  entrado, la habitación del chico se la imaginaba desordenada, discos de música, llena de revistas porno, y su adorada tabla de surf apoyada sobre la pared.
Se quedó observándola, JJ al ver la mirada de Kenzie un sentimiento de ira y vergüenza creció dentro de él.
-cuidado no te vayas a manchar por tanta pobreza.- le dijo JJ, y de un momento a otro había vuelto a ser el chico insoportable que conocía.
-¿Que estás diciendo?
-¿Eres sorda o qué?
-¿Por qué eres así?
-¿Así como?
-¿Tienes tanto odio en tu cuerpo que lo único que te consuela es joder la vida a los demás con tus constantes comentarios hirientes?- Preguntó cabreada y cansada de la situación.
-chicos ahora no...-Pope intentó tranquilizarlos.
-¿sabéis qué?- abrió la puerta de la furgoneta.- me voy, no pienso compartir espacio con el, no aguanto más.- salió a paso rápido, Pope gritaba su nombre para que volviese.
Pero en ningún momento hizo amago de volver, llegó a casa tras más de media hora caminando, al entrar nadie se encontraba ahí.
Llegó a su habitación y se cambió de ropa a unas mallas negras cortas y una camiseta grande con una foto de Louis Tomlinson.
Miró su instagram, inconscientemente se metió en el perfil de JJ, en alguna foto aparecían los cinco sonriendo o haciendo el tonto. Inconscientemente la hizo olvidar su enfado hacia el chico y sonrió, pero rápidamente se desvaneció al recordar lo idiota que era.
El contacto de su hermano Chase encendió la pantalla de su móvil llamándola, contestó enseguida.
-¿Chase?
-Acaba de ver a Tu amigo salir de comisaría, ¿dónde estás?- preguntó nervioso por su hermana.
-estoy en casa, ¿Que haces cerca de comisaría?
-n-nada, te dejo, hasta luego.
-Chase, ¿Que mierda...?- Antes de acabar ya había terminado la llamada.
Marcó el número de Kiara. Tras tres pitidos contestó.
-¡Kenzs!
-¡Kei!¿Que ha pasado?
-la policía nos pilló, pero no tienen la brújula...
-Iré a The Wreck, no tardaré.- cogió dinero y las llaves y salió de su casa, al llegar al Bar de la familia de Kei, el padre de esta la invitó a una limonada.
-¿besaste a John B?- preguntó sorprendida de que el chico al final se haya lanzado.
-en realidad me besó él a mi.- corrigió la morena todavía confundida ante la acción de su amigo.
Mackenzie la miraba con una sonrisa burlona.
-¿y que tal?
-Kenzs, me aparté, rompió la regla.- dijo como si fuese lo más lógico del mundo.
-Esa regla siempre me ha parecido estúpida, todo el mundo ha roto esa regla.
-¡Yo no!
-técnicamente eres una Kook de bolsillo, puedes liarte con John B.
-De corazón soy una Pogue. No quiero que por eso nuestra amistad se deteriore.
-te entiendo, pero sois lo suficientemente maduros para no dejar que ese beso se interponga en la amistad.- y hablando del Rey de Roma, por la puerta asoma, John B apareció por el bar, y eso significaba que Pope y JJ estaban también.
-vamos a hacer historia.- dijo nada más entrar.- dejad lo que estéis haciendo.
-¿otra vez fantaseando?- preguntó Kei saliendo del mostrador, y John B siguiéndola por detrás. Mackenzie supuso que esa conversación acabaría como sujetavelas así que como sabía de antemano que la morena iba a ceder, salió en busca de la familiar furgoneta, no sin antes terminarse la refrescante limonada.
Pope abrió los ojos y suspiró de alivio al verla ahí delante suya.
-creíamos que no habrías llegado.
-pues creíais mal, se cuidar de mi misma.- JJ se encontraba en silencio, ni siquiera la miraba.

Durante el camino, kenzie estuvo tumbada en el asiento final escuchando la conversación que mantenían hasta que pararon en el cementerio, cada uno llevaba una linterna.
Era por la noche por lo que entrar a un cementerio a esas horas les hacía estar más paranoicos.
-odio los cementerios.- se quejó Kenzie, a la par que Kiara.- ¿Que se supone que hacemos aquí?
-¿sabéis cuando intentáis acordaros de una canción pero no recordáis quién la canta?
-si.
-lo de Redfield, todo el tiempo he pensado que era un lugar, pero no es un lugar, es una persona.- dijo alumbrando una tumba.
-Hay que joderse.- dijo JJ.
-Era mi tatarabuela, Olivia Redfield, su apellido de soltera.
-¿Quieres que interrumpamos el sueño profundo de tu abuela para preguntarle dónde está el oro?- preguntó la rubia con sarcasmo, viendo que era una locura lo que estaban por hacer.
-ayudadme con puerta, venga.- los chicos se pusieron a empujar, Mackenzie se unió, consiguieron mover un poco hasta que un siseo sonó en sus cabezas, una serpiente salió de la tumba. Mackenzie soltó un grito, se agarró de la primera persona, que, para su suerte, era JJ, quien miraba asombrado y divertido al reptil, se apartó de él como si hubiese tocado lava.
-¡Ala, pedazo bicho!- exclamó, aquella serpiente era enorme.- ¡nuestra querida boca de algodón, la muerte en la hierba alta!- empezó a hacer ruidos para llamar la atención del animal. Si hubiesen estado en otra situación se hubiesen reído ante los comentarios sin sentido pero estaban entrado en la tumba de la tatarabuela de su mejor amigo.
-¡JJ calla!
-vas a despertar a los muertos, joder.- dijo JJ entre dientes a Kiara, les dan miedo los perros, todo el mundo lo sabe. Esperad, esperad un momento.- paró a Jhon B.- si había una, podrían haber más.- volvió a ladrar. Todos le mandaron callar.
-John escucha, no podremos entrar, ¿entiendes? Deberíamos irnos.- Pope como siempre tan positivo.
-Kenzie o yo cabríamos.- Kenzie al escuchar lo que había dicho se giró alarmada, no sabían lo que había ahí dentro y su amiga básicamente la había invitado sin mucha opción a meterse en la tumba de esa pobre anciana.
-No,no,no,no, ¿Crees que cabéis por ese agujero?- preguntó John B, esperando expectante, pero no tanto como Kenzie.
-si, Kiara, ¿Quepo por ahí?
-se trata de su padre, y sinceramente, no me lo creo pero te mereces saber la verdad, lo haré.- todos se pusieron en modo para ayudarla a entrar, JJ la alzaría para que entrase mientras que los demás empujaban la puerta.- ¿Me recuerdas que buscamos?
-lo sabrás cuando lo veas.- la auparon y consiguió entrar. La iluminaron más.
-¿Has encontrado algo?
-Dios mío.

-¿Has encontrado algo?-Dios mío

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E P I P H A N Y (JJ maybank)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora