Quincuagésimo segundo intento

19.8K 2.2K 590
                                    

Lo volvería a hacer.

Por la mañana, papá ha regresado a su habitación de hotel. Mamá y yo tomamos desayuno en silencio, mientras cada uno está sumergida en las ideas que nos perturban. Cuando quiero hablar con ella, me adelanta.

—Espero que no sigas molesta conmigo por lo de anoche — dice y me lanza una mirada tímida, dejo el vaso sobre la mesa y sonrío un poco.

—No estoy molesta.

—Pero te pareció de muy mal gusto ver a tu madre con su ex.

—Y el ex es mi padre — le recuerdo.

Mamá apoya su mentón en una mano.

—Quiero que sepas que no necesitamos de él. Lo de ayer...

—Mamá, no tienes que darme explicaciones. Solo me descuadró un poco que tengas algo con él después de todo lo que sufrimos por su causa.

Mamá decide tomar un poco de su jugo. 

—No hemos regresado ni nada por el estilo — explica—. Solo nos divertimos un pocos, ¿sabes?

—Lo sé — digo—., pero hay otros tipos.

—Solo sucedió, cariño.

—Lo noté — digo, recordando el gorro de mapache.

—Algunas veces me siento un poco sola— me confiesa, y me toma por sorpresa.

Estiro un brazo para tocar su mano.

—Mamá, perdóname — susurro.

—No, no, no, mi vida—me dice—. No eres tú, solo es que el trabajo me está llenando la mente demasiado y por momentos necesito un respiro. Cambiar la rutina, cambiar de aires. Quizás debí hacerle caso a Daniela con lo de las citas por internet.

— Una relación en estas circunstancias no sería una buena idea — digo, untando mantequilla en mi pan.

—Tienes razón —dice afligida.

—Creo que deberías hacer un viaje, pero un viaje con tus amigos.

—¿Del trabajo?

—Los que se animen.

Ell parece pensarlo. 

—No tiene que ser un lugar lejos, puede ser cerca y te aseguro que te animará muchísimo, anda, inténtalo — la animo.

—Hablaré con mi grupo — mira su reloj de mano y se levanta de la mesa—. Se me ha hecho tarde para llegar a la oficina. Nos vemos en el almuerzo, cariño.

Luego de eso, me da un beso en la frente y sale corriendo por la puerta.

Me quedo en casa terminando de desayunar sola, aún pensando en mi conversación de hoy con Lilian, hasta que mi móvil suena por cuarta vez. Es Loann, estoy segura de eso. No ha parado de llamar desde que me desperté.

No seas cobarde, Defne. Debes hablar con él, decirle que todo está bien, que no estás insegura, que nada ha cambiado entre los dos.

Tomo el móvil y busco su número en mi directorio. Presiono la tecla verde, pero a los pocos segundos corto la llamada. Suelto el móvil con brusquedad sobre la mesa y froto mi rostro con ambas manos. 

Basta, Defne. Loann no es malo. No seas hipócrita, tú querías esto. Tú alejaste a Loann de Lilian. No pienses, no te atrevas a pensar que Loann te hará lo mismo, no será así. 

Vuelto a intentar llamarlo una segunda vez, una tercera, una cuarta, hasta que me rindo.

La quinta, me decido a tomarlo, pero esta vez llamo a alguien que ha estado en un lado oscuro de mi mente por muchos días. 

WHEN SHE WAS OBSESSED - COMPLETAOù les histoires vivent. Découvrez maintenant