¡CAPÍTULO EXTRA! Para siempre

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Ares

Me dejo caer sobre mi cama. Los pasados dos días fueron raros, Dereck me puso como padrino ¿Por qué? Ni la puta idea. Mad puso a Catherine como su dama de honor al igual que Chloe que está de novia con Dilan. Las cosas han pasado demasiado rápido. Tocan dos veces la puerta de mi habitación, me levanto y la abro.— ¿Estás listo?— me cuestiona Cat.— Tienes 5 minutos.

Se va. No pude evitar fijarme en el escote de su vestido color celeste, se veía jodidamente bien, su cabello estaba en un moño hermoso y su rostro ¡Dios! Parecía tallado por los ángeles. Meneo la cabeza, me aplico perfume y bajo. Todos, menos Dereck, están ahí. Veo a Maddie temblar de los nervios mientras que Chloe y Cat intentan tranquilizarla. Austin y Dilan conversan sobre que se yo en una esquina, me acerco a ellos y les pregunto si ya nos vamos. Ellos asienten y subimos al auto, a los pocos minutos llegamos a la locación, la boda es en la playa.

Una base de madera resalta ahí, llena de sillas blancas, flores, un altar y una larga alfombra. Todo combina a la perfección, los detalles de las flores resaltan sobre todas las cosas. Dereck está hablando con unos señores en una esquina mientras que los invitados empiezan a saludar. Los señores Morgan llegan acompañados de Sammy quien ahora debe tener 18 años ¡Madre mía! ¡Como ha pasado el tiempo! Ellos se acercan a Dereck quien ahora está a mi lado y lo felicitan. Me saludan con un cortante «Hola» y se ubican en sus asientos en primera fila.

Cuando Maddie llegó no le presté ni la mínima atención, a la única que veía era a Cat. Como sonreía con todas las ganas a pesar de que le haya echo mucho daño. La ceremonia transcurrió con normalidad, no pude evitar fijarme como una ligera lágrima bajó por la mejilla de Cat cuando Dereck dijo «acepto». Al besarse, los aplausos no tardaron en llegar. Luego, todos nos trasladamos a la gran área de reuniones del condominio de los Morgan. La fiesta, cabe decir que estuvo muy buena. La comida, como era de esperarse, estuvo deliciosa, las decoraciones estaban igual de bellas que las de la playa.

—¡Hora de lanzar el ramo!— gritó Mad por el micrófono haciéndome salir de mi cabeza.

Todas las chicas presentes, incluyendo a Chloe y a Cat se pusieron al centro de la pista. Cuando Maddie parecía dispuesta a tirarlo, se gira de imprevisto, se acerca a a Cat y le entrega el ramo. Ella la mira con confusión y Mad le señala detrás de ella.

Austin se encuentra con una cajita en sus manos mirando a Cat, la abre y recita lo que no quería que dijera:— ¿Quieres casarte conmigo, Cat?

Cat abre la boca por la sorpresa, sus ojos viajan entre los de Austin y los míos incontables veces, funcí el ceño. Sus ojos se cristalizaron y mordió su labios.— Perdón...— murmuró.— No puedo...

Cat salió corriendo del lugar rumbo a la casa dejando todos en shock, nadie se esperaba aquello. Dilan se acercó a Austin y le palmeó el hombro susurrandole:— Lo siento, amigo.

Yo seguía sin saber que hacer estaba entre correr a la casa y buscar a Cat e ir a reclamarle a Dilan por ayudar a Austin. Chloe se acerca preocupada.— ¿A dónde se fue Cat?— me preguntó.

Apoyé la lengua en mi labio inferior antes de hablar.— A casa, pero iré yo.

—¿Qué?— exclama.— ¡No!

—Déjame arreglarlo todo, Chloe, por favor.— le ruego.

—Ares, está confundida en este momento.

—¿Por qué?

Chloe se mordió el labio dando a entender de que se arrepentia de lo que había dicho.— Ve.— se rinde.

No me lo pienso dos veces y corro hasta la casa, los arreglos que le habían echo hizo que se me complicara abrir la puerta, busqué entre mis bolsillos la llave y cuando la encontré intenté abrir la puerta.— Maldición.— maldije cuando la maldita llave no abría y al hacerlo, cerré la puerta y corrí escaleras arriba. La puerta de Cat estaba entre abierta, la abrí y la encontré con el maquillaje corrido apoyada en la puerta del closet.— Cat...— susurro.

—Mierda, Ares, lárgate.— me pidió y negué con la cabeza.

—No cometeré el mismo error dos veces, hobbit.— digo y la abrazo.— ¿Por qué te negaste?— pregunto en un susurro.

—No podía,— murmura.— no cuando llegaste.

—No logro entender, Cat.— confieso.

—Sigues siendo el mismo idiota de siempre.— murmulla haciendome sonreír calmado. Tenerla entre mis brazos era una de las cosas que más ansiaba en todos estos años.— Creí olvidarte— dice contra mi pecho.—, pensé que había dejado atrás toda nuestra historia...— se detuvo un momento para mirarme a los ojos.— Pero no fue así.

Esas hermosas órbitas azules brillaban a causa de las lágrimas haciendo que mi corazón se contraiga y me cueste respirar.— Yo...— continua.— Te sigo queriendo, Ares, y me odio por eso.

Mis ojos se abrieron con fuerza, ella no me había olvidado, seguía en su corazón y juro que seguiré ahí por siempre.— Te amo, hobbit, nunca dejé de hacerlo.— confieso.

—Tengo que decírselo a Austin.

Niego con la cabeza.— Primero esto…— y la beso.

Junté mis labios con los suyos como he anhelado por años, no fue un beso calmado, era salvaje y lleno de ansias. Su lengua recorría cada lugar de mi boca, al igual que yo lo hacía con la suya. Nos separamos momentos después para tomar aire, sus mejillas estaban sonrojadas, sus labios rojos e hinchados y sus ojos contagiaban felicidad.

Al día siguiente

El ambiente del desayuno estaba tan tenso que podría partirse con un cuchillo. Maddie y Dereck partieron a su Luna de miel a Hawai después de lo ocurrido con Austin y Cat.— Em..— Cat se aclara la garganta.— ¿Puedo hablar contigo, Austin?

Él suspira como preparándose y asiente. Se dirigen a la sala pero su conversación aún es audible, al menos para mí.— Lo lamento, Austin.— se disculpa Cat.

Veo a él negar con la cabeza.— Cuando Ares llegó logré percibir como lo miraste, nunca me has mirado así.— empieza a hablar y me atraganto con la comida.— Siempre ha sido él, Cat, y tengo que aceptarlo.

—Te quiero, Austin, como amigo.— aclara Cat.

—También te quiero, Cat, como algo más.— dice Austin y ambos comparten un abrazo.

—Estoy segura de que encontrarás a alguien quien te ame, loquito.

—Y yo se que Ares te ama, loquita.

Ambos se acercan y señalo con mi cabeza las escaleras, Austin asiente y ambos nos acercamos ahí dejando a Cat con Chloe y Dereck.— Gracias por cuidarla, Austin.— digo.

Él niega con la cabeza.— No hay nada que agradecer.— dice mirandola.— Ella es genial...

— Lo sé.— digo.

—Me refería al sexo, gime de tal manera...

Mi mirada matadora y alterada lo interrumpe.— Es una broma, Ares, nunca lo hemos echo.— algo en mi se relajó.— Sé que ya nunca más la lastimarás ¿Verdad?

—Jamás.— aseguro.

—Que bueno, porque biene hasta acá. Disfruten.— dice y palmea me hombro antes de irse.

—¿Amigos?— cuestiona ella.

—No enemigos.— corrijo y Cat sonríe.— Subamos a mi habitación.— susurro contra su oido.

Ambos nos dejamos caer sobre la cama mientras nos besamos salvajemente.— Y pensar que aquí empezó todo.— susurra nostálgica Cat.

—Eres mía, hobbit, para siempre mía.

—Y tu eres mío, idiota, para siempre mío.









Nota de la autora: ¡Hola, pedacitos de persona! ¿Este es el final oficial de esta novela?


YouOnIce2

Eres mía, solo mía | Glacies (P #1) ✔️Where stories live. Discover now