Nicholas Riggs y la Orden del Fénix

28- Semanas de Navidad

Nicholas y Severus aparecieron frente a lo que el chico reconoció como la entrada a la casa de Sirius, el cuartel de la Orden del fénix, en menos de dos segundos. Nicholas miró a su padre en silencio, sorprendido por el lugar que había elegido para llevarlo. No veía a su padre compartiendo en la misma casa con Sirius Black, y menos en las circunstancias en las que estaba ahora.

-¿Estás bien?-preguntó Snape, mirándolo de reojo. Era la primera vez que le hablaba desde que habían salido de la mansión Prince.

Nicholas asintió, y le dedicó una pequeña sonrisa, que su padre respondió como pudo. Se notaba que estaba triste, que estaba dolido.

-Todo estará bien, papá-susurró Nicholas, tomando el brazo de su padre.

El hombre asintió, mirando adelante-de verdad no queríamos que supieran lo que estaba pasando de esta manera.

-Deberías haberme contado antes lo de... Iris. Yo te habría entendido, y lo sabes.

Severus bajó la vista a su joven hijo y asintió-¿Me habrías entendido?

-Bueno... sí. Si quieres estar con... ¿Grace Morgan, se llama?

Su padre asintió.

-Significa que de verdad debe gustarte. Y... yo te apoyo en todo, papá... solo necesito que me expliques un poco. Porque no entiendo nada-susurró el chico.

Snape asintió y le indicó una banca en el parque que había frente a la casa. Ya había pasado la hora del almuerzo y podía verse como pronto comenzaría a llover. El día estaba totalmente nublado. 

-Debí habérselos explicado antes, pero desde que... sucedió lo que sucedió, no hemos estado bien con su madre.

Nicholas asintió, indicándole que siguiera hablando. Sabía que para su padre debía ser difícil comenzar esa conversación, pero una vez que hubiera empezado, sabía que se le haría más fácil.

-Después de un mes-prosiguió Snape, mirando como comenzaba a caer un poco de nieve. Era un día frío-decidimos separarnos. Era lo mejor para la familia, Iris y yo... teníamos ideas muy distintas de lo que queríamos para nuestros hijos... sobretodo por el hecho de que Iris estaba pensando en pedirle... a... a Voldemort... que la perdonara.

Nicholas miró a su padre sorprendido. Nunca lo había escuchado decir el nombre de Voldemort, siempre decía "El señor tenebroso". Pero ahora suponía que el hombre ya había terminado de perder todo ante él, y no quería tenerle más respeto.

-Quería vivir una vida de mortífagos, que según ella... "era más digna de una familia de sangre pura como nosotros"-Snape soltó una risa fría, llena de odio-yo no soy sangre pura, y ella lo sabe.

-¿No eres sangre pura?-preguntó Nicholas, impresionado.

-No... mi padre era un Muggle. Tobias Snape.

-Wow... no lo había imaginado.

Snape levantó las manos como diciendo "sin embargo, ahí lo tienes", y siguió mirando el suelo en silencio.

-¿Y cuándo conociste a Grace?

-Después de terminar con tu madre... cuando nos hubimos separado, vine a la orden del fénix a hablar con Albus, a darle un reporte... y ella estaba allí. Yo... la miré y lo supe. Supe que la amaba en el momento en que la miré... no sé como... pero solo he sentido eso con una persona...

-Con Lily-susurró Nicholas, con una pequeña sonrisa.

Snape asintió-con Lily.

-¿Y cómo es ella?