La Leyenda de Spyro, el Destino del Dragón

Capítulo 19: En la Dimensión Oscura

(P.V de Nina)

Nina abrió los ojos para encontrarse que estaba echada sobre una isla flotante gigante en un espacio oscuro, con varias rocas flotando alrededor. El ambiente era frío; sin embargo, no era un frío normal: era como si cada minuto ahí diera escalofríos.

"Brrr, ¿dónde estoy?" se preguntó a sí misma.

"Bienvenida Nina" dijo una voz entre las sombras, pero a diferencia de la voz de Ignitus, esta voz era más ronca y algo más... siniestra.

Mirando hacia arriba, vio a un enorme dragón púrpura descendiendo: tenía tres cuernos curvados, varias espigas en su lomo, una cola con punta con forma de hacha y alas antiguas. Sin embargo, lo que más le atemorizó eran sus ojos: unos ojos amarillos malvados que ella había visto una vez en una pesadilla. Sin lugar a dudas era Malefor, el maestro oscuro.

"¿Cómo sabes mi nombre?" preguntó Nina algo atemorizada, pero lista para pelear si fuera necesario.

"Oh, no deberías sorprenderte por eso" le dijo Malefor caminando a su alrededor, "He estado vigilando a tus padres desde que los ancestros me encerraron en esta maldita prisión. Sé que eres su descendencia"

"¡¿Esta es tu prisión?!" se sorprendió la joven dragona al ver alrededor.

"Espero que no te importe el desorden de mi humilde morada" continuó Malefor en un tono obviamente sarcástico, "Después de todo, es gracias a tus padres que estoy aquí"

Nina no dijo nada. Malefor continuó examinándola de cuernos a cola rodeándola como un león que acorrala a su presa antes de lanzarse a por ella. La dragona se quedó inmóvil al sentir como los perversos ojos amarillos le recorrían todas las escamas.

"Umm el parecido que tienes con Cynder es extraordinario" dijo finalmente, "En escamas y en poderes"

"Mi madre no es asunto tuyo" le reclamó Nina, "Mi papá me contó lo que le hiciste a ella: la usaste para tus planes malignos"

"¿En serio? ¿Te lo contó todo? ¿Incluyendo como ella engaño a tu padre para liberarme hace más de diez años?"

"¿Qué? ¿De qué hablas?"

"Tu madre llevó a tu padre al pozo de las almas por su propia voluntad, no porque yo se lo ordenara, eso provocó que me liberaran en la anterior era"

"No, no te creo..."

"Que me creas o no es tu elección. Sin embargo, ¿no estarías más interesada en conocer los orígenes de tus poderes oscuros, como te lo dijo el pirata Snite?"

"¡Sé que tú y el son mentirosos!" gritó Nina al mismo tiempo que le lanzaba una ráfaga de fuego oscuro a Malefor.

Malefor no se inmutó ni dio señales de protegerse. Con solo levantar su garra derecha, bloqueó el ataque de Nina sin ningún esfuerzo.

"Dragoncita débil, ¡yo soy el maestro oscuro!" se jactó Malefor.

Con un solo movimiento de su cola, golpeó a Nina y le arrojó a cierta distancia. Aún dolida por el golpe, Nina intentó ponerse en pie para continuar luchando.

"No te preocupes" le dijo Malefor, "Aunque destruirte sería una venganza más tentadora que haber traído aquí tu padre para destruirlo, tengo unos planes mejores para ti como los tuve con Cynder"

"No... me uniré a... ti" le contestó Nina jadeante.

"Umm, tal vez necesites un poco de persuasión"

Nina no pudo hacer nada: lo último que vio fue los enormes ojos de Malefor antes de volver a sentirse llena de odio, llena de maldad, llena de oscuridad...