Un Hombre Casi Perfecto [Kacchako] Completo

Capítulo 30

Todos los personajes son de la serie Boku No Hero Academia (My Hero Academia) del mangaka Kōhei Horikoshi. Esta historia sólo utiliza los nombres de los personajes para entretenimiento sin fines de lucro.

La historia está basada en la novela de Linda Howard "El Hombre Perfecto", si deseas leer la historia original para comparar las tramas, envíame un mensajito y con gusto te paso el archivo PDF.

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Uraraka muy apenas llevaba una hora en la oficina cuando recibió visitas inesperadas.

— ¡Hola chicas! — Saludó un chico pelirrojo con ropa casual y que llevaba una charola de 4 cafés en las manos. — ¿Cómo están? — Todas: Uraraka, Yaoyorozu, La Brava y Nejire voltearon al ver al chico que tenía una sonrisa ligera en los labios.

— ¿Kirishima? ¿Qué haces aquí? — Preguntó la castaña sorprendida mientras todas miraban hacía el oficial que parecía estar de incógnito, llevaba un atuendo deportivo, y en vez de llevar el cabello arreglado lo presumía desordenado, y ella descubrió que lo tenía más largo de lo que parecía.

— ¡Les traje café! — Soltó ligero mientras levantaba la charola — Justamente cuatro, uno para cada una. Tomen, tomen, sin pena. — Hizo una seña para que las demás se acercaran, y éstas lo hicieron dudosas, sorprendidas por la amabilidad del desconocido. — Son dos cafés americanos sin añadimientos, aquí tengo el azúcar y la crema. Los otros dos son frappes dulces, elijan el que más les guste. — Todas se miraron, Uraraka y Nejire eligieron los frappes, y Yaoyorozu y La Brava los americanos.

Lo siguiente fue un silencio incómodo, Kirishima seguía sonriendo de pie mirando el lugar, pero la contadora sintió que no sólo estaba ahí para llevarles café.

— ¿Podemos hablar? ¿A solas? — Le preguntó, y él asintió mientras ambos salían de la oficina, las demás intentaron a hacer sus actividades pertinentes, sabían que estaba ocurriendo algo.

— ¿Qué pasó? — Preguntó ella rompiendo el silencio — ¿Mineta es el culpable? ¿Lo acusó? ¿Por qué estás aquí? — Lo atacó con preguntas, Bakugou no sólo había ignorado sus mensajes todo el día, sino que en la noche sólo se limitó a escribir un "gracias, lo tendré en cuenta" y después le dijo que iba a estar en la fiscalía hasta tarde y no se iban a poder ver.

— Pues... — Empezó él dudado, mirando hacia su alrededor para ver que no hubiese nadie escuchando — El caso se complicó un poquito.

— ¡¿Qu-?! — Estuvo a punto de gritar, pero Kirishima fue más rápido y le tapó la boca para que no hiciera ruido alguno. — ¿Qué? — Volvió a repetir más tranquila.

— Sí, sólo un poquitito — Hizo una seña con su mano, pero su rostro se veía ansioso — Aunque no te preocupes, ¡Tenemos una pista!

La castaña seguía con el corazón taquicárdico pero intentó controlarse.

— ¿Una pista? ¿Y por qué estás aquí? — A ella no me gustaba comportarse de esa manera, pero enserio estaba nerviosa, y que Bakugou estuviese descomunicado simplemente la hacía sospechar de todos.

— ¿Cómo te lo digo? — Se preguntó a su mismo el pelirrojo — Aquí está la pista, o la persona mejor dicho, que nos va a ayudar.

— ¿Es por eso que vienes con ropa de civil? — Cuestionó ella, pero antes de que su respuesta fuese contestada, escuchó como unos pasos se acercaban, y vio a Bakugou acercándose hacía ellos.

— Kat... — Quiso decir pero se calló de inmediato, simplemente por los gestos en su rostro y su postura al caminar podía adivinar que estaba de mal humor, incluso los ojos rojos se le marcaban más de lo normal.