Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
No seré rosa confundida con coralina,
viviendo adherida en la roca marina.
Seré siempre fiel a mi sentir, plena y real.
¡Qué por siempre sea a él mi devoción eterna e inmortal!
Nunca permitiré sea su fluir rosa inerte,
ni que exista siquiera sequía,
que sé por alcanzarle en vida la muerte,
tendrá por siempre mi esencia eterno aroma a rosa.
Y he de compadecerme de aquel pobre ser que así no lo entiende:
que por existir en mí esta maravilla de estar loca,
de sensiblería embebida,
no tiene mi alma más que aroma a rosa,
y por estar de ella enamorada,
en su humanidad me hallo sumida.
No ambiciono ahora y nunca más fortuna,
que no romper este lazo y, que de hacerlo, nos desuna.
Que nunca débil nazca mi llanto
como una semilla a la sombra de una piedra,
ni muera mi grito olvidado en un nido de piedra.
Que no permita el infortunio que aflore mi risa gastada,
así como el agua gasta lentamente la piedra
y que no sea mi canto salado y mudo de esperanza
como una indolente piedra.
No sembraré mi sentir siquiera en piedra preciosa,
porque no brotan de la piedra, rosas majestuosas.
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
YOU ARE READING
Entre versos y otros tesoros: antología
PoetryApartado especial para los poemas ganadores de los desafíos organizados por el perfil de poesía en español.
