Capítulo 8 "Towa Y Setsuna".

6.1K 314 83
                                    

En cuanto había visto a su castaña en ese estado, y recordando todo lo que pasó desde que la conoció, supo que el nombre indicado para su segunda hija es Setsuna, representando como eran sus vidas desde que se conocieron, él siempre tendría una eternidad y ella una vida demasiado corta, la cual para él, aunque no le gustara reconocerlo, sería como un instante fugaz, es claro que nunca la olvidaría, y es que sería incapaz de olvidarse de aquella chiquilla que lo hizo cambiar de sobremanera, una simple humana, pero siempre la más valiosa en toda su vida. Nunca se había detenido a pensar de lo fugaz que sería su vida desde su perspectiva, a pesar de ser consciente de que es humana, no hasta que regresaron esa mañana luego de que unos monjes quisieran llevarla a una aldea, esa mañana por primera vez desde que la conoció, lo tomó por sorpresa una de sus preguntas: "Incluso si yo muriera algún día, ¿Usted me recordará para siempre?". Demostró su sorpresa por unos segundos, antes de responderle "No digas tonterías", es claro que jamás podría olvidarse de ella, ni aunque pasaran cientos o miles de años.

Esta mañana él se encontraba junto a su madre. Ella cargando a Towa y él a Setsuna, intentando hacerlas dormir.

Los 4 días anteriores, desde que ellas nacieron, Irasue lo "regañaba", alegando la forma correcta en que debe de cargarlas. Ella no quiso irse, estaría unos días más y volvería a irse a su castillo, aunque ahora regresaría con mayor frecuencia al palacio.

Luego que por fin consiguieron hacerlas dormir, las acostaron con cuidado.

-Irasue: Quién se hubiera imaginado que terminarás siendo padre y cuidando de tus cachorras —se mofo tras recordar el comportamiento que él tenía antes de la muerte de Inu No Taisho, diciendo en pocas palabras la forma de perder el tiempo en lugar de entrenar u otras de que no tendría descendencia con ninguna youkai. Aunque en lo último tuvo razón, su descendencia no fue con alguna youkai, sino con una humana.

El peli-plata ignoró por completo su comentario pasando por la puerta que conecta ese cuarto con su habitación.

-Irasue: En unos días más estarás mejor y saldrás de aquí, Rin.

-Rin: Ya estoy mejor...

-Irasue: Unos días más —repitió saliendo de la habitación.

-Rin: No tienen que preocuparse tanto, ya estoy bien —susurró, viendo de reojo al peli-plata.

Luego de lo que pasó la castaña, supieron que fue una excelente idea que Mai fuera al palacio, al ser igual que la castaña y Kagome, además de estar presente en otros partos, ya sabía lo que debía hacer, había llevado todo lo necesario. A diferencia de con Kagome que no hubo complicación alguna, para la castaña fue distinto porque el peli-plata es un youkai y eran 2 bebés.

Después de dos días, cuando Mai estuvo lo suficientemente segura de que la castaña estaba en perfectas condiciones, regresó al Este.

-Sesshomaru: Al menos ya sabes que era lo que trajo —dijo, tratando de cambiar de tema.

-Rin: ¡Sí! Es muy linda la ropa y las sábanas que trajo para ellas —continuó comiendo.

Sesshomaru se sentó en el futón junto a ella, viendo en dirección al cuarto, desde su lugar podía ver a las 2 dormir. Agradece internamente conocer a Ken, el lord del Este, y que él le haya ayudado a que Rin viva mucho más tiempo.

~~~~~~~~

En los siguientes días, Sesshomaru a estado aprendiendo más cosas con la llegada de sus hijas y piensa que eso es solo el principio, al igual que la castaña. Ya no puede durar mucho tiempo el silencio del que disfruta cuando revisa alguna cosa importante, o al pensar u observar a la castaña, porque cuando menos lo espera, sus hijas están llorando, a veces al principio solo llora una, pero no pasa mucho para que la otra empiece a llorar, sea porque tienen hambre, necesitan un cambio o cualquier otra cosa que para él podría ser lo más insignificante.

¿Una vida tranquila?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora