La vida de adolescente de Arthur Kirkland. Hetalia

Parte 59

-Y ¿qué piensas? - Te pregunta Francis después de un rato en que decidieron sentarse en una banca.

-Pienso que me volaste la cabeza. - Y el rie de buena gana, pero tú sabes que es cierto, aun tienes una pregunta en la punta de la lengua que no puedes evitar formular. - ¿Pero si es tan normal porque los discriminan tanto? - Francis alza una ceja y te mira fijamente, tú bufas. - Bien, ¿Por qué los discriminamos tanto?

Y ahí está, los vestigios de la alegría se van de su rostro, y ahora es un semblante lleno de tristeza el que te saluda.

-Es por los roles de género. - Y ni siquiera necesitas preguntar, porque el mismo te lo explica. - La sociedad es quien define como debemos de actuar, creen que por tener un pene o una vagina ya saben cómo debemos comportarnos, que si los hombres debemos ser fuertes, agresivos e intrépidos, que si las mujeres deben ser femeninas, educadas, maternales y complacientes. Como si fueran inferiores a los hombres, como si fuéramos mejores que ellas, como si existiera una ley que dictamine como debemos de ser. - Y sus palabras están tan llenas de resentimiento, asco y tristeza que no te atreves a hablar. Él te mira cansado. – El problema de la vida, mi querido amigo, es que la gente presuponga saber quién eres y como eres. Jamás asumas nada. Un hombre no tiene que ser inquebrantable, también podemos llorar y apreciar la belleza. Una mujer no tiene que ser vulnerable y doméstica, también puede partirte la cara si quiere y dirigir una gran empresa si le surge el capricho. Ni el hombre tiene que evitar el color rosa como la peste, ni una mujer tiene que usar solo faldas como si solo pudieran vestir eso. Esos son roles de género que se han transmutado tanto con los años, que ahora son fuertes estereotipos y sexismos. Eso es enfermo y dañino. Una de las razones que tuve para hablar contigo de esto, fue porque quería evitar que más personas siguen en su ignorancia lanzando odio como si nada. ¿Recuerdas al hombre de la otra vez? - Tu asientes- No es la primera vez que me agreden de esa forma, pero siempre es el mismo sentimiento, me da tanta rabia y tristeza. Yo no quiero que más niños como yo crezcan en un mundo así, cuando vives siendo parte de un grupo rechazado, aprendes que hay muchas cosas que están mal en nuestra sociedad. Todos parecen enfermos, definen que es normal como si tuvieran el derecho de establecerlo, cuando ni ellos entienden que es ser normal. ¿Quieres saber que es ser normal? - No respondes, pero el sigue. - Normal es tener la libertad de acostarte con la persona que quieras sin tener que darle explicaciones a nadie. Normal es que las señoras no alejen a sus hijos de ti como si tuvieras una enfermedad contagiosa. Normal es que respetemos a los niños, a los adultos y a los ancianos. Normal es dejar a la mujer estudiar ingeniería sin dudar de sus capacidades. Normal es no burlarse del hombre que quiere estudiar turismo. Normal es dejar de pensar que hay un sexo débil. Ser normal es ser empático y solidario con los demás. Eso es ser normal, no la mierda que te dicen los prejuiciosos y sexistas.