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Bueno, la petición general fue que lo escribiera desde el punto de vista de Quio, pero no podrá ser, así que voy por la otra petición: Lurad? Alguien además de Ira que las shippee?

Dedicado el pin a MiriamHida :)

Un beso a todos :3

Por fis, lee mi nota al final!

Junn

Lucien

Llegamos a casa de Cole porque sus padres no estaban. No estaba seguro de qué éramos, pero me gustaba. Cole era genial, era ni mejor amigo, podía contarle lo que quisiera y él nunca me juzgó ni me traicionó.

Y eso me asustaba como la mierda.

Porque ahora me tenía en sus manos, ahora podía destrozarme por dentro. Porque me di cuenta de que aunque él me golpeara, yo nunca podría devolverle el golpe.

A lo largo de mi vida, sólo mis hermanos habían conseguido esa contestación de mi parte, porque eran para mí mi mundo. Los únicos que se merecían todo de mi parte. Aún no me había atrevido a contarle a Cole lo que más miedo me daba, lo que más me asustaba. Miré por mi manga el claro recordatorio de mi sufrimiento, abrasandome por dentro a fuego lento.

Me sacó de mi ensoñación la mano del chico que ahora era mi mundo, agarrándome aquello que tanto miraba. Estábamos sentados en el sofá viendo una película, Pacific Rim. Era de monstruos gigantes que se peleaban con robots gigantes. Una película que era una pasada y esas cosas, Cole y yo odiábamos las películas románticas y esas mierdas.

-¿Qué tanto te miras?- me preguntó, haciendo que sus ojos derritieran los míos. Eran claros en una gran contraposición a los míos, oscuros.

-Yo...- empece, sin saber si decírselo de una vez o no.

-Por favor, Lu, simplemente dilo- me pidió. Escuché los fuertes sonidos que venían de la tele y suspire suavemente.

-Hay algo que no te conté y que... Bueno, que quiero que sepas porque es algo importante y.... Bueno, es que...

-Deja de balbucear- se rió por lo bajo, haciéndome imitarle. Asentí.

-Me intenté suicidar- se quedó callado unos segundos y simplemente me miró fijamente.

-Qué... Dime que es mentira- respiré hondo y le enseñé la cicatriz del brazo. El la acarició por encima suavemente, yo aún seguía mirándole con un poco de miedo.

-No- tuve que decirlo en alto, así era más real.

-Dios, Lu...

-Estaba tan desesperado... Sentí que no era nadie, que nadie me querría jamás, que me odiarían y yo...- me abrazó con fuerza, atrayéndome hacia él y pegando sus labios a los míos.

-Entonces dime de donde viene este sentimiento que tengo cada ve que miro- me dijo contra mis labios. Agarré el pelo de su nuca y lo estampé contra mí, como sí no tuviera suficiente con tenerle tan cerca, como si quisiera que nos fundiéramos. Porque esa era la realidad. Quería que se fundiera conmigo y que fuéramos uno, pero no era posible.

-Esto no está bien- me alejé de él lo máximo posible, aún permanecí sentado-. Me siento mal al sentir esto. No puedo querer a otro hombre.

Cole me acarició la mejilla y me arrinconó un poco contra uno de los brazos del sillón.

-No te sientas mal por amar, siéntete mal por odiar el amor- me susurró, de nuevo besándome, esta vez para posicionarme sobre él. Abrace su cuerpo y lo estreché contra mí, sintiendo su calor contra mi frío cuerpo.

When Ira met QuioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora