There's A Place (Novela de The Beatles)

Capítulo 23

Ya era hora de ir al funeral, me encontré a todos ahí: a Astrid, John con Cynthia, Paul con Jane, Ringo con otra chica que no conozco, el último era George, el sorprendente venía solo Ahí estaba mi desesperante ex suegra, la Señora Sutcliffe nunca fue de mi agrado para mí, esa fue una de las razones por las que mi compromiso con Stuart termino, ella prefirió mil veces a Astrid y aún no se la razón.

-Hola Susan- dijo la Señora Sutcliffe-

-Ah…- dije casi sin mirar- Hola Señora Sutcliffe-

-Me alegro que hayas traído a mi nieta, así me la podré llevar. Mi marido, Astrid y yo cuidaremos ahora de ella-

-¿Qué?- pregunte exaltada- ¿Por qué Señora?-

-Porque tú no estás capacitada ni moral ni económicamente como para cuidar a mi nieta, así que te pido que me la des-

-Señora no sé qué se ha creído para decir que yo no puedo cuidar a mi hija adecuadamente, conseguiré trabajo, cuidaré de ella hasta el fin pero no se la puede llevar-

-Lo siento mucho, pero no te pregunte, además lucharé por su custodia, tengo abogados- llegaron ellos- Llévense a la niña por favor- 

-¡No!- grité fuertemente- ¡No me quiten a mi hija!-

En seguida los chicos fueron corriendo a ver qué ocurría

-Por dios- dijo Cynthia- Susan ten más respeto por Stuart, no grites de esa manera-

-¡Cállate la boca!- le grité- No me quitaran a mi hija Señora Sutcliffe-

-¿Qué ocurre aquí?- pregunto Paul-

-Chicos- dijo la señora- No es algo que les competa saber, abogados llévense a la niña. Susan más te vale que no intervengas-

Los abogados me quitaron a mi hija y se la llevaron, yo estaba muy triste y llorando, los chicos se acercaron para consolarme. Jane y la novia  de Ringo no me conocían pero Cynthia si y estaba furiosa.

-¿Qué ocurre Susan?- pregunto John y se sentó a mi lado- 

-Ella… la Señora Sutcliffe me quiere quitar a mi hija- respondí llorando-

-Eso es terrible- dijo Paul acariciando mi cabello- Nosotros te ayudaremos a que la rescates- 

-Exacto- dijo la novia de Ringo- Mucho gusto señorita mi nombre es Maureen Cox-

-El gusto es el mío señorita Maureen- dije con lágrimas en los ojos- 

-Bueno no creó que este sea el mejor lugar para quedarte aquí- dijo John- Te acompañaré a tu casa-

-No creo que tú debas acompañarla a casa- furfuro Paul molesto- 

-Tampoco tú McCartney- le respondió John-

-Vamos chicos, yo dejaré a Susan en su casa- dijo George- Vamos tal vez podríamos ayudarte a recuperar a tu hija-

-Gracias George, nos vemos otro día chicos-

-¡Adiós!- dijeron los demás excepto Cynthia

En el auto me encontraba platicando con George, él era demasiado atractivo.

-No creo que sea buena idea que le hable a John o a Paul, ellos están comprometidos- le dije en voz baja a George-

-Creo que sería lo mejor Susan, y menos a John con todo lo que paso en su escuela-

-Tienes razón George… y tú… ¿Tienes novia?- pregunte-

-No- dijo George rojo- No tengo novia-

-Es super raro porque tú eres un chico muy lindo-

-Oh… oh gracias- se sonrojo mucho-

-Bueno me retiro, gracias por traerme George- murmure-

-Mañana vendré por ti, es enserio cuando decimos que te ayudaremos a recuperar a tu hija-

-Gracias, tú y los demás son encantadores-

-Nos vemos- se despidió de mí con un beso en la mejilla-