CAPITULO 39: VENGANZA

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-¡Yibo!- Lev llego junto con Cornelt.

-Ella ya está descansando con él.-

-Ellos están juntos ahora.-

-Esto tenía que pasar.-

-¿Ellos serán felices verdad?- abrazaba el cuerpo de su madre mientras lloraba.

-Lo serán, ¿Y sabes? Ellos siempre te protegerán y amaran.- Cornelt abrazo a Yibo.

-Esto tenía que pasar ¿Verdad?-

-Sí, lamentablemente sí, pero nos tienes a nosotros.-

-Siempre nos tendrás.-

-Gracias tío Cornelt.-

-De nada pequeño.- el abrazo de Cornelt era tan paternal que Didi se sentía tranquilo.

-Vamos, tenemos que limpiar todo esto.-

-Si Lev.-

Los tres hombres caminaron juntos a la salida donde la ambulancia había llegado junto con ellos los forenses quienes levantarían los cuerpos de las victimas en los cuales se encontraban la señora Wang y su enfermera.

-¿Estás bien?-

-Solo fue una explosión pequeña no es para tanto.-

-Ni siquiera supimos cuando entraron.-

-Quizás se dieron cuenta del rastreador o alguien que vino a visitar a un paciente.-

-Un infiltrado.-

-Así es, debió haber una manera en la que descubrieran todos nuestros aparatos.-

-Dilraba.-

-Hay alguien más detrás, una persona que quizás es mejor que Zhuo Cheng en informática.-

-Solo nos queda buscar.-

-Mu Jian ya dio la cara la muerte de mi madre es una estocada dura para él.-

Al llegar afuera se encontraron con Zhuo Cheng quien monitoreaba el movimiento de Mu Jian.

-¡Qué raro!-

-¿Qué es lo que pasa?-

-Cuando llegaron aquí no mostraron ni un rastro, pero ahora que se mueven los puedo registrar.-

-¿Crees que hay alguien más?-

-Sí, una persona que es igual de buena que yo.-

- ¿Qué le paso a tu GPS?-

-Nunca mostro sus movimientos es como si se hubiera congelado.-

-¡Oh valla!-

-Es muy raro, esto solo lo vi que una persona lo pudo hacer.-

-¿Qué?-

-Alterar los GPS.-

-Si yo también lo he visto, quías te refieres al aire.-

-No estoy bromeando comandante hay una persona que yo conozco que...- guardo silencio y abrió los ojos, volteo a ver a su novio.

-¡Farid! Debe ser él.-

-¿Qué? Farid ¿Pero cómo?-

-¡El primer ministro!-

-¡Cierto! El se llevaba bien con él.-

-Cuando nosotros entramos a trabajar aquí el...-

-Él se fue a Shangai y nunca nos dijo sobre su trabajo.-

Sueños RobadosWhere stories live. Discover now