Lo que ignoramos

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- ¿Por qué no me habías dicho que pelearse duele tanto? - preguntó Nat mientras mantenía un rictus de dolor

- Pues nunca me preguntaste que tanto dolía - respondió Cat mientras desinfectaba con dificultad los nudillos de Nat la cual sentía el ardor en las heridas y retiraba las manos constantemente -Deja quietas las manos, solo un poco más y ya - 

Nat se quedó mirando el hilo de pestañas largas que se formaban alrededor de los ojos de su amiga y sonrió, era bastante cierto que pelearse dolía mucho sin embargo la sensación de descarga de adrenalina y satisfacción que conllevaba también era algo bueno

- Entiendo porque te peleabas...-

Cat se detuvo y miró a su amiga, después negó con la cabeza

- Es cierto que liberar toda esa ira interna es una sensación placentera pero pelearse nunca es bueno, la violencia genera violencia - comentó Cat - Las veces que he tenido que pelearme por alguien ha sido por defender a otra persona, jamás he decidido por gusto propio lastimar a alguien porque creo que no es correcto - 

- Pero al final del día es violencia ¿No? Defiendas a alguien o no, es violencia - dijo Nat

- Es cierto - respondió Cat dándole los últimos suaves toques a los nudillos de su amiga - Por eso siempre hay que intentar evitarlo - 

Cat se puso de pie y miró a Nat quien estaba sentada en la sala mirando fijamente sus manos

- Me gusto lastimarla...- musito Nat

- Lo sé...- respondió Cat mirando a su amiga - Pero no dejes que esa sensación placentera se quede ahí por siempre, no es correcto - 

Nat asintió con la cabeza y despues Cat se dirigió al baño con la cajita de primeros auxilios en la mano intentando sostenerla con los dedos de la otra mano que quedaban libres de la férula. Nat siguió sentada mirando sus manos, si algo era bastante cierto es que se sentía mal pero no por haber golpeado a Isabel sino por el hecho de discutir con Zahid, no lograba entender como no había podido comprender la situación, odiaba el hecho de que defendería ciegamente a otras personas sin escuchar ambas versiones de la historia.


Por la noche Cat se encontraba ensimismada escribiendo cuando recibió un mensaje en el grupo de amigas que tenían, tomó su móvil y miro la pantalla, el mensaje provenía de Sara

"¿Estan ocupadas?"

Cat respondió inmediatamente

"No, solo estoy escribiendo ¿Todo bien? Nat no esta, salio con Cesar y Alex tal vez esta dormida"

"Oh sí, todo bien, hablamos después, descansa" fue el mensaje que llegó como respuesta

Cat se extraño y dejó el móvil a un lado encima de su escritorio, se puso de pie y se dirigió a la ventana, la abrió para recibir el aire helado de la noche en su rostro. La luna lucía bastante brillante en el cielo y no había mucho ruido alrededor.

Cat cerró los ojos y arrugó la frente de tal forma que sus cejas casi parecían tocarse, tenía una expresión profunda de pensamiento. Las cosas que últimamente estaban sucediendo a su alrededor la hacían sentir demasiado impotente, en especial con el tema de Sara ¿Quién podría estarle causando daño a su amiga?

- Lo peor es que intentaran lastimarla físicamente ¿No? - preguntó mientras miraba a Brisa que se encontraba recostada en una camita especial para ella que estaba en la esquina de la habitación, la mascota solamente ladeo la cabeza mientras miraba fijamente a su dueña

Cat miró de nuevo al exterior, sabía que continuamente habían problemas alrededor de ellas pero tenía miedo de que se fuera a repetir el patrón de cuando Rodrigo apareció y alguna de sus amigas fuera lastimada de nuevo. Cerro la ventana y se arrojó sobre la cama sumergiéndose poco a poco en un profundo sueño.

Amistad a BordoWhere stories live. Discover now