Corazón Salvaje [EunHae]

Capítulo 40: "Soluciones"

Hyuk estaba sentado a mi lado con su mirada enterrada en el té que tenía delante. Noté que se sentía incómodo en el silencio de la sala porque comenzaba a mover frenéticamente la rodilla de arriba a abajo, haciendo temblar mi mano que tenía apoyada sobre él. 

Miré a mi hermano que intentaba disfrutar de su café, aún con los ojos rojos por tanto llorar. Aunque no sabía si la incomodidad se debía a otra cosa. 

-¿Ustedes dos se sienten incómodos entre sí?- Me sinceré, hablar sin rodeos iba a ser mi nueva religión. No pensaba volver a contenerme.

Hyuk detuvo el movimiento de su pierna y Jongwoon bajó su taza con tal delicadeza que no emitió ningún sonido. Ambos al unísono me contestaron observándome fijamente 

-No-

Asentí varias veces para que supieran que no estaba celoso ni nada por el estilo.

Mi hermano agarró un dulce y le dio un bocado, a juzgar por su rostro saboreó cada milímetro de él. Con sus ojos aún cerrados disfrutando del placer me habló -Aunque no lo creas hace mucho tiempo que no estoy interesado en él y ya que nos sinceramos, todo lo que sentía era molestia porque creía que seguías detrás de ... - Abrió los ojos mirándome fijamente - Ya sabes a quien me refiero- 

Agarré un dulce del mismo plato que lo había hecho él hace unos instantes y me lo metí completo a la boca. Hacía mucho tiempo desde que comía algo tan rico. 

-Sabes - Me limpié las comisuras con una servilleta - Desde hace mucho tiempo no siento nada por él, y el día de tu boda, supongo que en el momento en el que te marcó, dejé de tener una conexión con él.- 

Hyuk que estaba en medio de nosotros dejó caer su porción de torta antes de que lograra llegar a su boca. Me miró con los ojos muy abiertos, realmente estaba sorprendido, tanto que intentó decir algo pero no pudo, solo balbuceos salían de su boca. Por otro lado mi hermano comenzó a reírse a carcajadas. 

-Te entiendo Donghae, ese día también dejé de tener cualquier conexión con Eunhyuk-

Ambos asentimos y bebidos té, mientras el alfa en la habitación se agarraba la cabeza. Con un movimiento rápido tomó un gran sorbo de té y lo tragó. Luego con la misma velocidad volteó a verme - Si no sentías nada por él entonces en ese momento ¿Por qué te quedaste?-

Yesung tomó la tetera e intentó volver a llenar su taza, pero esta estaba vacía así que me hizo seña de que iba a buscar más agua y se fue con una sonrisa pícara en el rostro. Él sabía la respuesta.

-Por ti- Lo observé como si le hubiera dado la respuesta más obvia del mundo, aunque siendo sincero el Donghae de ese momento no tenía idea de por qué se quedaba a vigilar del extraño que quería arruinar el matrimonio de su hermano.

Sus profundos ojos negros me penetraban, su sonrisa tardó varios segundos en aparecer y las arrugas que se le formaban eran tiernas. 

Tomé su mano y la apreté. Él con su mano libre me tomó por la nuca y me acercó a su rostro. Sus labios gruesos se presionaron sobre los míos y mis párpados cayeron lentamente.

Sus labios apresaron mi labio inferior, tirando de él de manera suave y lentamente, levanté mis brazos llevándolos a su espalda, cuando comenzaba a succionar con más fuerza me aferré a su ropa con fuerza. 

Mi corazón latía cada vez más rápido y nuestras respiraciones comenzaron a ir en el mismo compás,  además de que nuestras narices se rozaban cada vez que cambiábamos de lado. 

Estaba apunto de abrir la boca para profundizar el beso cuando el sonido de la bandeja de Yesung llegó a nosotros. Él intentaba dejar el té en la mesa e irse silenciosamente, pero lo habíamos notado y nos separamos con gran velocidad.